El departamento de salud de Castellón ha abierto una investigación tras recibir una denuncia sobre supuestas irregularidades en la gestión de la resonancias magnéticas en el Hospital General, en la época de gobierno del Partido Popular. La gerencia del área confirmó que el pasado lunes se recibió en el registro un escrito por parte del jefe del servicio de Radiología. En él se ponían de manifiesto presuntas irregularidades en la gestión de la firma que gestiona este servicio (Eresa), que se habrían producido con anterioridad a los actuales responsables.

A raíz de estos hechos, que se remontan a más de 10 años, el departamento de salud va a proceder a revisar las facturaciones que pone en duda dicho jefe de servicio y trasladará el documento de denuncia a los servicios centrales de la Conselleria de Sanidad y Salud Pública. Una vez contrastados, el departamento abrirá una información reservada.

Presumiblemente, se trata de un aparente desfase entre la facturación que la concesionaria realizaba a su departamento hasta el 2008, cuando superaba los cuatro millones de euros al año, y lo que ha facturado a partir de entonces, algo más de dos millones, pese a aumentar el precio de las pruebas. Habla de cantidades de 4,4 millones en el 2006 y 4,6 en el 2007. Sin embargo, con el concierto que se implantó en 2008 se elevó el precio de las mismas y creció el número total de resonancias. Pero la facturación decreció, con 2,4 millones en el 2008, 2,3 en 2009 y 2,2 en el 2002. Algo que la denuncia achaca a presuntas manipulaciones en la facturación del 2000 al 2008.

La Sindicatura de Comptes concluyó en un informe durante la pasada legislatura que la gestión pública de las resonancias había permitido reducir el coste medio de la exploración de los 257,1 euros en 2012 a 108,3 euros, un ahorro situado entre los 3,3 millones y los 16,7 millones.

LA EMPRESA // Por su parte, desde Eresa explicaron que tras revisar la documentación de hace más de 10 años han constatado que la diferencia en la facturación se debe a que antes del 2008 había ganado la resonancia de dos hospitales (Provincial y General), cuyas pruebas se facturaban conjuntamente. Mientras, en el 2008, una UTE pasa a desarrollar el servicio tras el nuevo concurso y solo se incluye el General y no el Provincial, y cambia el catálogo.