Tras semanas de peticiones por parte de los profesionales sanitarios, la Conselleria de Sanidad dio ayer a conocer las cifras generales del plan de vacaciones y refuerzos en centros de salud y consultorios en zonas turísticas cara a esta próxima campaña estival. El departamento de Ana Barceló destinará 61,3 millones de euros, lo que supone un incremento de un 6,81% respecto al presupuesto del 2018, con la contratación de 9.407 profesionales para la Comunitat. Los sindicatos califican la propuesta de «brindis al sol» y recuerdan a la Conselleria que no hay «suficientes doctores» para cubrir la asistencia, de ahí la importancia de lograr que médicos de familia acepten la petición de doblar turnos.

El plan entrará en vigor el 1 de julio, cuando los centros de salud cerrarán por las tardes y la asistencia se garantizará en los puntos de atención continuada (PAC) o las urgencias del hospital de Vinaròs, el General de Castelló y la Plana de Vila-real. De todos modos, desde Sanidad apuntaron ayer que algunos ambulatorios han solicitado alargar el cierre de tarde hasta el 15 de septiembre, pero esta petición no se ha resuelto, «porque se están estudiando y se autorizarán en caso de estar plenamente justificada».

De los 9.407 profesionales que se prevé contratar para las sustituciones de los que se van de vacaciones, se calcula que cerca de 1.000 son doctores, aunque Sanidad no ha especificado cuántos pasarán consulta en la provincia. En cuanto al apartado de refuerzos de verano, el programa contempla emplear a 422 personas, 128 en Castellón. Estos asistirán 25 centros de Atención Primaria y los 18 consultorios habilitados, un año más, para atender a la población desplazada en la provincia -como refleja el gráfico de la información-.

La consellera de Sanidad, Ana Barceló, aseguró ayer que, con este plan, «se garantiza la asistencia en cualquier punto de la Comunitat». Por contra, tanto el Sindicato Médico CESM como CSIF advierten de que va a resultar «imposible» cubrir todas las vacantes «porque no hay médicos disponibles» y auguran «un problema asistencial».

En este sentido, el gerente del Departamento de Salud de Castellón, Miguel Alcalde, indicó que ya hay médicos de familia que han aceptado doblar turno, lo que, junto a la contratación de doctores extranjeros, procedentes de Sudamérica y los países del Este, confían en poder disponer de «suficiente personal».