La plaga de mosquitos que afecta a poblaciones del litoral de la provincia, como Torreblanca, Xilxes o Almenara, ha provocado una ola de malestar entre vecinos y hosteleros que reclaman tratamientos más efectivos y acciones excepcionales, por parte del Consell, como pueden ser las fumigaciones aéreas. La patronal del sector ha hecho un llamamiento al Gobierno autonómico para que tome cartas en el asuntos porque este problema «ahuyenta» a los visitantes. Sanidad no ha cogido el guante y rechaza, de momento, llevar a cabo otras medidas.

La Conselleria apuesta por seguir con el plan impulsado en el 2016, que prevé ayudas a los municipios para combatir el mosquito tigre, una especie invasora que avanza sin control y ya afecta a 69 municipios de Castellón, según los últimos datos publicados por el Laboratorio de Entomología y Control de Plagas de la Universitat de València.

El problema radica en la cuantía de estas subvenciones. El año pasado fueron 48 las localidades de la provincia que solicitaron estas ayudas para sufragar los tratamientos, aunque entre todos los que pasaron la fase de justificación sumaron 44.851,56 euros, de los 450.000 de la convocatoria para toda la Comunitat.

Y es que el importe que percibe cada uno de ellos depende, entre otras circunstancias, de la extensión del mismo. Según datos de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, que gestiona la convocatoria de Sanidad, este año se han recibido 52 solicitudes de la provincia, es decir, cuatro más que el pasado año.

la partida va a menos // La controversia radica en el hecho de que más ayuntamientos optan a las ayudas, que se han reducido este año en 50.000 euros, pasando a 400.000. Sin duda, resulta chocante que ante el avance imparable del mosquito tigre esta partida mengüe, en lugar de aumentarse para dar una mayor cobertura a los municipios.

Las ayudas del departamento de Ana Barceló se centran en sufragar los controles ideados para combatir al mosquito tigre.

Sin duda, el importe resulta insuficiente dada la magnitud del problema. Los expertos consideran que es necesario homogeneizar criterios a nivel europeo, aunque un reciente estudio sobre el mosquito tigre efectuado en Italia apunta a que una cantidad aproximada sería de un euro por cada habitante. Esta inversión sería solo para hacer frente a la especie tigre; en paralelo iría la cuantía para atajar otras especies, como sería el común o el de marjal en la provincia.

De forma pareja a Sanidad, el Consell está desarrollando, a través de la Conselleria de Medio Ambiente, un proyecto piloto en la Vilavella y Betxí, que consiste en la suelta de miles de machos estériles, que no pican, para lograr que las larvas de las puestas no tengan viabilidad.