El número de empresas inscritas en la Seguridad Social en la provincia de Castellón fue de 26.560 durante el primer trimestre del año, según informó ayer el portal estadístico de la Generalitat Valenciana, que extrae los datos ofrecidos por el Ministerio de Trabajo. Esta cifra supone un incremento de casi cincuenta nuevas empresas con respecto al último trimestre del 2017 y un alza del 1,9% si se toma como referencia el mismo periodo del año anterior, que terminó con un total de 26.081.

La Seguridad Social recupera así lentamente el número de empresas cotizantes en la provincia de Castellón, que tuvo en el segundo trimestre del 2017 uno de sus mejores momentos desde el estallido de la crisis, hasta alcanzar las 26.626 sociedades cotizantes, según las mismas fuentes.

Prácticamente tres de cada cuatro empresas que cotizan a la Seguridad Social en Castellón lo hacen bajo el régimen general, con casi 20.286, mientras que el segundo grupo en importancia lo compone el sistema especial de trabajadores del hogar, cuya cuantía se establece en los 5.173, mientras que el régimen especial agrario no llega a las mil empresas, según se expone en el listado de la Generalitat Valenciana.

PUEBLO A PUEBLO // Del total de empresas inscritas a la Seguridad Social, 6.360 tienen su domicilio social en la capital castellonense, cuya cuantía no ha parado de crecer en el último año, al igual que lo que sucede en Vila-real, donde el número de sociedades ha vuelto a crecer hasta situarse en las 1.469, lo que representa una clara recuperación del sector empresarial en la amplia comarca de la Plana Baixa.

Parecida evolución se ha dado en el último año en otros municipios como es la Vall d’Uixó, con 866 empresas cotizantes tras un año de leves incrementos trimestrales o en Vinaròs , con 1.074.

Otros ejemplos de ciudades que ven incrementado su censo de empresas suscritas a la Seguridad Social son Almassora, con 814 sociedades o Burriana, donde el número de negocios es de 807. Esta buena evolución en el número de compañías cotizantes, aunque aún lejos de los números que se daban en los años anteriores a la crisis, con cifras por encima de las 30.000, representa una sustancial mejoría por su evolución que, de seguir a este ritmo, habrá recuperado lo perdido en apenas 2 años.