Castellón, con 13.092 apartamentos turísticos, sigue aumentando la oferta legal, con 191 altas en lo que va de año, pero con la lupa muy puesta en la próxima Semana Santa, época propicia para el alquiler ilegal de habitaciones, junto con verano, Nochevieja y eventos de ocio como festivales de música en la costa (caso del Arenal Sound, Rototom, FIB o SanSan) o festejos patronales en pueblos de interior.

Reclamos que utilizan en sus anuncios gran parte de la bolsa de pisos pirata, que están en el mercado sin cumplir ni con la normativa del sencillo trámite de alta en el Registro Turístico en la Generalitat ni con los impuestos que pertocan, generando una competencia desleal con los hoteleros. Justo ayer se conoció otra sentencia favorable a Turisme Comunitat Valenciana frente a Windu, una plataforma de alquiler vacacional de pisos «sin registro».

MUCHAS VIVIENDAS VACÍAS

Desde la óptica empresarial, el presidente de Ashotur, Carlos Escorihuela, opina que «la oferta ilegal de apartamentos turísticos es muy difícil de erradicar dado que existen muchas viviendas vacías y segunda residencia. Es complicado de localizar y la picaresca existe. Ahora, en Semana Santa, o cuando hay acontecimientos especiales la tentación de alquilar una habitación crece. No pagan impuestos ni tienen cargas. Son una competencia desleal».

Por su parte, el directivo de Altur Castellón, Javier Gallego, valora que «incluso en localidades más blindadas como Peñíscola y Benicàssim el alquiler irregular ha crecido. Debido a un fenómeno demográfico, hay apartamentos familiares que han pasado de padres a hijos y están desocupados. Los descendientes optan por alquilar el apartamento en fechas clave, cuando sube la demanda, y dicen que vienen unos amigos. Compiten en la mayoría de casos de forma ilegal».

Con casi un trimestre vencido, la oferta legal tampoco para de crecer. La provincia ha registrado una media de 2,4 apartamentos legalizados cada día. Un ritmo que no decae y que da cuenta de la alta demanda que genera este tipo de hospedaje.

Acerca del incremento del arrendamiento ilegal de apartamentos durante festivales, fiestas, puentes... el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, explica que «son momentos en los que crece la demanda y, por tanto, las dos ofertas, la reglada y la picaresca». «En cualquier caso, estamos en un momento de transformación digital global donde todos estamos sufriendo algunas de las consecuencias de esto. Es una batalla que se libra mayoritariamente en las redes y en las plataformas que comercializan por internet y ahí es donde hemos reforzado acciones y donde continuaremos», dice.

Para Colomer, más allá del control presencial con visitas, en colaboración con las policías locales, pretenden dar mayor alcance a través del rastreo a través de las redes sociales e internet. Colomer reuerda que es un problema global, ante el cual la Comunitat continuará defendiendo al empresario reglado, que crea riqueza y ocupación, y los derechos del consumidor, que «no puede acabar sufriendo las consecuencias de las malas prácticas de aquellos que no cumplen la ley».