Siete de cada 10 estudiantes egresados del grado de Medicina de la Universitat Jaume I (UJI) han aprobado el examen MIR (médico interno residente). De los 94 presentados, se estima que puedan elegir plaza 70 de ellos, un 74,4%, que quedarían aproximadamente entre los 8.000 primeros, de los más de 15.000 presentados en total, que podrán escoger su objetivo: la plaza de residentes.

Aunque por curso, en la UJI, solo sean 80 estudiantes, parte de los que se presentaron son alumnos que se graduaron en el 2017 o el 2018 que no superaron el MIR en años anteriores o no se presentaron. De todos modos, los datos son todavía aproximados y provisionales y no se puede hacer una comparativa por universidades, dado que el Ministerio de Sandidad no publica los resultados provisionales de España por campus hasta el próximo verano.

En la provincia de Castellón para los médicos recién graduados que hayan aprobado el MIR, aunque también jóvenes facultativos de procedentes de otras provincias pueden optar, hay disponibles 81 plazas distribuidas en los tres departamentos de salud. Se trata de cuatro más que la pasada convocatoria, con un ligero incremento en medicina familiar y comunitaria, donde se encuentra uno de los principales problemas por la falta de profesionales.

falta personal // Y es que a la Conselleria de Sanidad le está resultando casi imposible la contratación de refuerzos para los centros de salud, aunque el problema es aún mayor cuando se trata de pediatras. Hace tan solo unos días la Sociedad Valenciana de Pediatría alertaba de que el plan de contrataciones anunciado hace un año por la consellera Ana Barceló no se había podido completar debido a la falta de especialistas en la atención a los menores.

Un inconveniente que la propia Barceló reconoció a finales del pasado año, aunque advirtió que no tenía previsto emplear a médicos de familia para asistir a niños, una práctica muy común para poder cubrir las vacantes.

El motivo principal de la escasez de profesionales es la falta de plazas MIR que el Ministerio de Sanidad publica todos los años. Estudiantes de Medicina, colegios profesionales, sociedades científicas y la propia Conselleria han alertado en numerosas ocasiones de la urgencia de ampliar el número de plazas residentes para poder hacer frente a la presión asistencial que existe, así como al relevo generacional. Esta decisión es potestad del Gobierno central y no del Consell.