El Patronat d’Esports de Castelló anunció ayer que la tradicional carrera de Cavalls per la Joia se suspende este año, en la que debería ser su tercera edición tras su recuperación, la 22ª de su historia, «por falta de competidores inscritos». Un evento que el año pasado reunió en la playa del Gurugú a siete participantes, pura sangre árabes, ingleses y cruzados, que ofrecieron un espectáculo con mayúsculas a más de 60 kilómetros por hora en la misma arena, que este año no se repetirá.