Vicent Soler, conseller de Hacienda, compareció ayer para analizar los presupuestos de la Generalitat valenciana en clave castellonense. Un total de 136 millones de euros, más los 38 del plan Edificant, se destinarán directamente a Castellón. Los presupuestos atienden reivindicaciones como el edificio oncológico del Hospital Provincial, la facultad de Ciencias de la Salud en la UJI, los centros de salud del Raval y de la Vall d’Uixó, los edificios judiciales de Vila-real y Vinaròs, o la ronda suroeste de Vila-real. Entre las ausencias, dos en la capital: el edificio de Borrull y la culminación de la circunvalación de Castelló, a las que se refirió el conseller junto a Adolf Sanmartín, director de Presidencia de la Generalitat en Castellón.

En cuanto al edificio de Borrull, Soler explicó que «se está avanzando muchísimo», y recordó que el Ayuntamiento ya había aprobado los permisos. En breve se firmará el convenio entre consistorio y Generalitat, propietaria del edificio de los antiguos juzgados. «Toda la obra correrá a cargo del Ayuntamiento», dijo Soler, que indicó que, una vez acabada, el 33% del edificio lo usará la Generalitat para «políticas inclusivas» y lo demás el Ayuntamiento para «servicios sociales». Sanmartín apuntó que se espera que en el 2020 «salga a concurso». Después, el plazo de ejecución del proyecto sería de 22 meses.

En cuanto a la ausencia de la culminación de la ronda de circunvalación de Castelló, Sanmartín se excusó diciendo que se había hecho «un esfuerzo muy importante para incluir la de Vila-real», aunque añadió que «sigue siendo una prioridad y se intentará llevar a término». En esa línea, Soler recordó los más de 800 millones del presupuesto que no están asignados por territorios, y no cerró la puerta a que una parte pudiera destinarse a completar la circunvalación en Castelló. Cabe recordar que faltan apenas 2,2 kilómetros para conectar las rondas Oeste y Sur.

Soler explicó que los presupuestos se habían determinado en torno a la triple R: «reivindicativos (de una mejor financiación), realistas y rigurosos». Destacó el carácter social, reforzando servicios públicos y apostando por un modelo productivo centrado en la innovación y la lucha contra la emergencia climática.