El conseller de Hacienda, Vicent Soler, remitirá un escrito al Gobierno para reclamar la creación de un fondo extraordinario de 1.325 millones de euros que permita al Consell cuadrar su presupuesto del 2017. Este dinero debería llegar de forma «que no tengamos que devolver», afirmó, y no vía Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), «préstamos que hay que devolver con intereses».

Soler así lo anunció ayer, después de que el Comité técnico de evaluación del sistema de financiación autonómico confirmase que no habrá cambio de modelo este año. Con ello, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, «incumple la promesa» que hizo en la conferencia de presidentes autonómicos del pasado enero, le censuró el conseller, y convierte en «ficticios» los 1.325 millones que el Consell incluyó (por segunda vez) en sus presupuestos para este año, afirmó.

El titular autonómico de Hacienda reconoció que este dinero incluido en las cuentas del Ejecutivo autonómico es «reivindicativo» (para reclamar el cambio en el modelo de financiación autonómico); y en este sentido ha cumplido su cometido, ya que, en el debate, «los representantes ministeriales han asumido la injusticia que padecen los valencianos», aunque para paliarla «no planteaban otra cosa más que la exigencia de recortes», apuntó.

Es por ello que el conseller exigió «una financiación por derecho» que equipare la valenciana al resto de comunidades autónomas. Máxime cuando «se ha demostrado que sí hay dinero», como con los «acuerdos que incrementan la brecha entre unas comunidades y otras», en referencia a los 4.000 millones que el Gobierno ha acordado sumar al cupo vasco de financiación.

«condena» // Ante esto, Vicent Soler censuró que el Gobierno central «pretenda condenarnos a tener unos servicios públicos de peor calidad que en el resto de España», como el último informe sobre la financiación de la Sanidad ha puesto sobre la mesa, ya que la valenciana destina cinco puntos porcentuales menos que la media. Soler también apuntó que el sistema de financiación caducó el 1 de enero del 2014.

Sobre esto, Rajoy y el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, coincidieron ayer en que sería conveniente aprobar de forma urgente un nuevo modelo que solucione los problemas.