La Comunitat Valenciana es la región con menor porcentaje de vehículos rechazados en la primera visita a la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), con un 12%, frente a Melilla, con un 52% que no pasa la revisión a la primera, según el informe «La posventa está en el centro» elaborado por Solera. El documento refleja que los talleres de reparación de automóviles dejan de ingresar alrededor de 500 millones de euros al año por los vehículos que no acuden a las ITV.

El documento, presentado en el marco del Congreso & Expo de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto), pone de manifiesto que en caso de que todos los vehículos de más de cuatro años cumplieran «sin excepción» con su obligación de ir a la ITV, los ingresos de la posventa procedentes de estas inspecciones pasarían de 2.100 a 2.600 millones de euros anuales, un 25% de crecimiento.

Por comunidades autónomas, Andalucía, Madrid y Cataluña son las regiones españolas en las que los talleres obtienen más ingresos procedentes de las ITV. En el caso de la Comunitat Valenciana, los ingresos ascienden a 144,8 millones de euros. El estudio recuerda que muchos conductores se cambian de comunidad en busca de precios más asequibles para superar esta prueba.

Además, apunta que el 60% de la facturación de la posventa por la ITV corresponde a daños graves en los vehículos, frente a un 40% de leves. La C. Valenciana es la región con menor porcentaje de vehículos rechazados en la primera inspección, con un 12%, frente a Melilla, con un 52% de vehículos que no pasa la ITV a la primera. Desde Solera destacan que la asociación AECA-ITV trabaja para luchar contra el absentismo de los vehículos en esta inspección, ante lo que ha solicitado, entre otras, la prohibición de renovar el seguro del vehículo si no se ha pasado la prueba.