C astellón, a las puertas de los meses más complicados del año por la gota fría, cuenta con más municipios con riesgo de sufrir inundaciones de calado, 31, y muy pocos --solo seis, apenas una quinta parte de estos-- con los preceptivos Planes de Actuación Municipal (PAM) para hacerles frente, tal y como marca la Agencia Valenciana de Emergencias.

La proximidad a cauces y barrancos, embalses, etc. marca entre otros factores la evaluación del riesgo. Según fuentes de la Conselleria de Justicia, en el último año «se ha hecho un análisis geográfico más exhaustivo y se han incorporado barrancos y zonas inundables que hasta entonces no constaban», por lo que se han sumado nuevas poblaciones a la lista.

Y es que en el 2019 la cifra se mantenía en la provincia en 19 localidades con riesgo medio y alto de sufrir riadas; mientras que ahora --según la última actualización de este verano-- serían 31. El resto se puntúa con un riesgo bajo.

La capital, Castelló, no consta, pero fuentes municipales explicaron que el PAM está redactado ya por los técnicos y solo pendiente de «la aprobación por pleno y homologación de la Generalitat». Mientras, disponen de otro plan ante diversas emergencias (Platemcas), que incluye un apartado específico de inundaciones. H