Los árboles del interior de la provincia se encuentran entre los grandes damnificados por el virulento temporal de nieve, lluvia y viento que ha azotado con fuerza a Castellón. Cientos de ejemplares caídos bloquean caminos, rutas senderistas y accesos a campos y parajes, dejando un panorama desolador en numerosos puntos de la Serra d’Espadà y el Alto Palancia.

Así lo denuncian los alcaldes, que alertan de que muchos propietarios de parcelas no pueden acceder a sus tierras y que advierten del riesgo para los montañeros que hacen excursiones.

Los ayuntamientos piden ayuda para despejar sus términos y lamentan la falta de medios para afrontar la situación. «Es un panorama tremendo y desolador. No tenemos maquinaria para poner soluciones y necesitamos ayuda. Las visitas senderistas pueden resentirse debido a las malas condiciones en las que está ahora la montaña. Hemos trabajado mucho para acondicionar nuestros caminos y ahora perderlo todo», ha explicado la alcaldesa de Alcudia de Veo, Maria Eugenia Villar, quien ve peligrar la carrera de trail que alberga su localidad a principios de mayo y que supone una gran fuente de ingresos.

Y es que los alrededores del pico de la Rápita, el más alto de Espadà con sus 1.106 metros, presentan una imagen de lo más triste, como denuncian senderistas consultados por este diario. «Allí los pinos y ramas derribados se cuentan por centenares y da verdadera lástima», han lamentado los montañeros.

Pistas cortadas

En Pavías las pistas están «totalmente cortadas e impracticables». Así lo ha relatado su alcaldesa, Mari Carmen Vives. «El viernes pasado vinieron los forestales. Nos dijeron que iban a declararla zona catastrófica, porque el temporal ha arrancado árboles enormes de raíz. No tenemos posibilidad de afrontar esto y necesitamos que la Generalitat nos ayude. Hay quien ha estado a punto de echarse a llorar cuando ha visto cómo han quedado sus fincas», ha contado la munícipe a este rotativo.

El paraje de los Cloticos de Bejís, con una popular zona de merenderos, también está bloqueado y las ramas caídas sobre el cableado eléctrico preocupan a los vecinos. La olivera centenaria de la plaza de la localidad ha quedado «desgajada», tal y como ha apuntado la alcaldesa, María José Madrid. «Para la costa en seguida han anunciado muchas ayudas, pero el interior también existe y necesita auxilio», ha reivindicado la primera edila.

La vía verde de la estación del Palancar en Barracas también ha sufrido las consecuencias del peso de la nieve. Asimismo, el último temporal ha dañado pinos, carrascas y robles en Sant Joan de Penyagolosa.