El abandono de la superficie dedicada a la agricultura continúa imparable en la Comunitat Valenciana. En el 2015 se perdieron un total de 1.908 hectáreas de tierras de cultivo, lo que supone un incremento del 0,28% de suelo agrario abandonado respecto al año anterior, según se desprende de un estudio de la Asociación Valenciana de Agricultores (Ava-Asaja) en base al informe del sector agrario valenciano que hizo público recientemente la conselleria de Agricultura.

Castellón contaba en el 2014 con 144.878 hectáreas de superficie agraria, mientras que en el 2015 esa cifra bajó hasta las 144.006 hectáreas, lo que supone un aumento del 0,6% del suelo agrario abandonado. El único cultivo que tuvo más superficie en la provincia es el del cereal de grano, que pasó de las 6.949 hectáreas del 2014 a las 7.186 del pasado año, lo que supone un notable incremento de un 3,4%.

El presidente de Ava-Asaja, Cristóbal Aguado, afirma que “da la impresión que estas estadísticas del 2015 no reflejan la desesperante realidad que atraviesan los agricultores y ganaderos de la Comunitat Valenciana”. Aguado añade que “la previsión aparentemente positiva de un año concreto no puede ni debe esconder la desastrosa evolución que viene experimentando el sector agrario en los últimos tiempos”. H