En solidaridad a la huelga del sector del taxi que ha bloqueado Madrid y Barcelona esta semana en contra la invasión de los vehículos de turismo con conductor (VTC), los taxistas de Castellón se pusieron ayer los chalecos amarillos, al igual que sus compañeros de Valencia y Alicante.
«No secundamos el paro, pero, a la espera de que la Generalitat presente su normativa de regulación de este servicio en la Comunitat, apoyamos a los compañeros que sí lo están sufriendo en las principales capitales». Así se expresó ayer el presidente de la Cooperativa del Taxi en la provincia, José Luis Artola, que fue uno de los que «desde primera hora de la mañana» de ayer trabajó con el chaleco amarillo «mañana, tarde y noche» y así seguirá «sine die, hasta que haya una solución a este problema, que es muy grave para todo el sector».
Artola señaló que «son más o menos unos 60 de los 123 taxistas los que secundan este apoyo», que se fraguó, especificó, a través de las redes sociales «con los compañeros de toda la Comunitat, con quien estamos en permanente contacto por este tema».
PACTO EN LA COMUNITAT //
La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, afirmó ayer que la Generalitat «entiende» las movilizaciones y por ello, destacó, «se intentará pactar una regulación; la Generalitat tiene abierta una audiencia pública sobre el proyecto de decreto ante otra liberalización perjudicial».
