Las medidas excepcionales puestas en marcha por las autoridades para luchar contra el coronavirus han puesto de moda el concepto de teletrabajo. Pero esta capacidad de desarrollar actividades desde los domicilios también puede aplicarse a otros entornos. Es el caso de la solidaridad. El Banco de Alimentos de Castellón prepara una teledonación, en un proyecto común junto con la asociación Nadie Sin Su Ración Diaria.

Una de las campañas más visibles de la organización es la recogida de alimentos en la entrada de los supermercados. Era precisamente este viernes cuando estaba prevista una de estas jornadas, pero en esta ocasión no será posible. El presidente del Banco de Alimentos, Santiago Miralles, recuerda que las necesidades no se detienen en tiempo de aislamiento. “Ahora mismo disponemos de 30 toneladas de comida para repartir entre quienes más lo necesitan; si no hay entradas significativas de material, en un mes nos quedaremos a cero, y el número de personas que requieren ayuda ya se nota”.

Para prestar la colaboración, hay abierta una campaña de crowdfunding. Accediendo a este enlace. También puede hacerse un ingreso bancario -muchas entidades financieras ofrecen la posibilidad de realizar transferencias sin cobro de comisiones- en el número IBAN ES3101337597014200001542, y el concepto Emergencia coronavirus Banco de Alimentos.

Desde Nadie Sin Su Ración Diaria, Kilian Zaragozá destaca que el uso de la tecnología “es una forma de mantener la labor solidaria; el objetivo de esta acción, no es otro, que recaudar los fondos necesarios para poder cubrir y ayudar a todas las familias en situación de vulnerabilidad de la provincia de Castellón”.

MÁS ASISTENCIA / Hasta el brote de coronavirus en nuestro país, el Banco de Alimentos prestaba asistencia a 11.460 personas. La dificultades económicas derivadas de la emergencia sanitaria y el parón de la economía contemplan un aumento del 8,2%, con lo que la gente que necesitará de este recurso aumentará hasta las 12.400. “Somos de los primeros en detectarlo, y pensamos que la situación se parece a la que experimentamos en la crisis del 2008, aunque confiamos en que acabará mucho antes”, detalla Mirales.

Por otro lado, otro cambio en el funcionamiento de esta institución tiene que ver con la forma en la que se procede al reparto. En vez de recoger alimentos captan dinero, y se ha llegado a un acuerdo con la coooperativa Consum, de forma que los usuarios podrán disponer de tarjetas monedero para adquirir sus productos de primera necesidad. Una adaptación ante un panorama nunca visto hasta la fecha.