Uno de los casos de la crónica negra más inquietantes de los últimos tiempos en el Reino Unido sigue abierto y genera titulares que localizan una parte de la historia en el norte de Castellón. La policía y la fiscalía alemanas han reactivado la investigación acerca de la desaparición de la niña Madeleine McCann, con el fin de analizar la relación de este suceso con un preso condenado por abuso de menores, y que podría haber estado en la región del Algarve portugués --donde se perdió el rastro de la menor-- en fechas coincidentes.

Según la publicación del rotativo británico The Mail on Sunday, citando a fuentes de la investigación, un testigo afirmó haber visto a la niña en las inmediaciones de un restaurante de Alcossebre, antes de subir a una furgoneta con un hombre no identificado. Siguiendo con el relato de esta publicación, el testimonio indicó que esto ocurrió en la mañana del 28 de mayo del 2007, tres semanas más tarde de la mediática desaparición. El vehículo mencionado sería muy parecido al del nuevo sospechoso.

Esta información añade que un detective de la policía del condado inglés de Leicestershire «emitió una alerta internacional de Interpol con una advertencia de riesgo para personas desaparecidas, exigiendo que la policía española y alemana investigaran». Por un lado, para conocer posibles datos sobre la furgoneta y, por el otro, para tratar de localizarla, además de tratar de conseguir imágenes de cámaras de seguridad próximas o de testigos.

La documentación ahora conocida hace referencia a la zona de Capicorb, con una escasa densidad de población. En todo caso, se trata únicamente de la localización de una posible pista, sin que el negocio referido, ubicado en un antiguo almacén portuario, tenga nada que ver con los hechos ahora revelados.

DUDAS / Las novedades sobre este misterio albergan dudas en varios frentes. La fiscalía de la ciudad de Braunschweig asume que Madeleine McCann está muerta, pese a que la policía metropolitana del Reino Unido no tiene «pruebas definitivas» sobre el posible fallecimiento. Mientras, la prensa portuguesa apunta a que este sospechoso ya fue analizado y se descartó su vinculación.