Una repentina tormenta de granizo sorprendió ayer por la tarde a los vecinos de diversas localidades de Els Ports y Maestrat, causando daños de diversa consideración, y que se suma a la tromba de agua que ya sufrieron poblaciones como Montanejos -Alto Mijares- o Vilafranca hace una semana, como reflejó este rotativo en su edición diaria.

A los más de 40,8 l/m2 que cayeron en Morella en una hora, se sumaron los 25 de Forcall en diez minutos, los 10 de Coratxà, los 45 litros de Vallibona y los 14,6 de Canet Lo Roig, según la web avamet.org. Especial incidencia tuvo el granizo en Cinctorres y Xert. En la primera de estas poblaciones, donde se registraron 28,7 litros por metro cuadrado, el alcalde Toni Ripollés explicó a Mediterráneo que la tormenta dejó «piedras grandes que deshojaron árboles y causaron destrozos en huertos y vehículos». En este sentido, el granizo rompió lunas de diversos coches aparcados.

En cuanto a Xert, cayeron «multitud de piedras del tamaño de aceitunas en diez minutos», lo que obligó a retirarse de la piscina municipal a un grupo de niños que participaba en una clase y a multitud de vecinos que corrieron a retirar sus vehículos de la vía pública «por miedo a que estos sufrieran destrozos debido al granizo», relataban da este diario desde la misma población.

En Morella, la zona más afectada fue la de Canteret, donde la precipitación de granizo también causó daños en diversos vehículos. Por contra, en el casco de la ciudad amurallada la tormenta llegó en forma de agua y pese a caer granizo, este fue de menor tamaño y los efectos no resultaron tan negativos sobre la vegetación. Hay que indicar que los bomberos del Consorcio Provincial tuvieron que evacuar a una familia de una masía junto al río Bergantes ante la virulencia de las aguas fluviales y para poder evitar desgracias personales.

EN VILAFRANCA Y PORTELL // Otros registros destacados en esta tromba de agua que afectó por sorpresa a la provincia castellonense fueron los 22 litros por metro cuadrado en Vilafranca, en apenas 15 minutos, y los 18 de la localidad de Portell de Morella.

En otras poblaciones de la Tinença de Benifassà (Pobla de Benifassà, Bel, Castell de Cabres, Fredes...), la tormenta también se dejó notar con episodios de agua y granizo, conformando un inusual paisaje más propio del otoño que de las primeras semanas de un verano incipiente.H