Hay pueblos con más tractores que vecinos y, si uno recorre las calles y los caminos rurales del interior de Castellón, con toda probabilidad se topará con más de uno. Pero a estos vehículos agrícolas les ocurre lo mismo que a los llauradors: cada día están más viejos. La falta de rentabilidad en el campo y la falta de relevo generación también pasa factura a un mercado que está en clara decadencia.
De enero a octubre del 2019 se matricularon en la provincia 89 tractores nuevos, según los últimos datos del Ministerio de Agricultura. Una cifra que supone mucho menos de la mitad de las matriculaciones realizadas en el 2006, que fueron 229. Una estadística a la que hay que añadir la de los vehículos usados que cambiaron de titularidad. En unos casos por herencias, en otros, la mayoría, por compraventas de segunda mano que en su momento fueron importados ya usados.
La Asociación Nacional de Maquinaria Agropecuaria, Forestal y de Espacios Verdes (Ansenat) ha puesto cifras al fenómeno. En doce meses (de noviembre del 2018 a noviembre del 2019), se comercializaron en la provincia 217 tractores usados. En la Comunitat fueron 1.973 y la peculiaridad reside en que casi el 60% tenía más de 20 años. De ellos, uno de cada cinco superaba los 40 años. Y nivel nacional, la tendencia es la misma. Cada año se dan de alta unos 11.455 tractores nuevos y otros 28.000 usados cambian de titularidad.
4.500 vehículos activos
Pero una cosa son los tractores que se comercializan y otra los que están en activo. La DGT contabiliza en Castellón 4.563 y la Unió de Llauradors estima que más de la mitad supera los 20 años. «Esta obsolencia hace que la maquinaria agraria provoque numerosos accidentes y que se enfrente a numerosas dificultades para pasar las inspecciones técnicas, que han incrementado sus requisitos», explican.
El Ministerio de Agricultura es consciente de la situación y lleva meses trabajando en un decreto que regule esta maquinaria. El objetivo que se persigue es obligar a todos los propietarios a dar de baja a los que tengan más de 40 años de antigüedad.
