La provincia de Castellón tiene ocho tramos de carretera que están entre los 300 más peligrosos de España. Así lo indica un reciente listado publicado por la Dirección General de Tráfico (DGT), que para disminuir la peligrosidad en estos puntos y concienciar sobre la peligrosidad de correr demasiado al volante, va a incrementar los controles de velocidad hasta el próximo domingo a través de una campaña especial.

De este modo, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil duplicarán los radares en este tipo de vías, carreteras que presentan un mayor riesgo vial y que registran 8 de cada 10 fallecidos; y que son las más peligrosas tanto por los excesos de velocidad detectados como por la siniestralidad que presentan.

En Castellón, la CV-10 acumula hasta cinco tramos con altos niveles de peligrosidad a su paso por Nules, Vila-real, Borriol, Cabanes y la Jana. La N-340, un clásico en estas listas, tiene dos intervalos en los que los conductores superan los límites de velocidad con más frecuencia: entre Castellón y Benicàssim, y entre Alcalà de Xivert y Peñíscola. El tramo de la N-232 entre Vinaròs y Traiguera es otro de los señalados.

TIPOLOGÍA // En el último estudio de medición de la velocidad realizado por la DGT, los indicadores obtenidos describen que las vías convencionales limitadas a 90 km/h son las carreteras donde más se incumplen los límites de velocidad. 4 de cada 10 conductores circulan a velocidad superior a la permitida, un 25% superan la velocidad en más de 10 km/h y un 12% en más de 20 km/h. En el caso de las vías limitadas a 100 km/h, el porcentaje de vehículos que superan la velocidad establecida es algo menor.

Asimismo, la DGT ha puesto en marcha un proyecto para la señalización de estos 300 tramos localizados en carreteras convencionales, mediante la instalación de una rotulación fija que se sitúa bajo la señal vertical de limitación de velocidad del tramo.

VIEJA REIVINDICACIÓN // En materia de siniestralidad, la N-340 a su paso por Castellón acumula la inmensa mayoría de quejas de usuarios y transportistas, que llevan años denunciando la peligrosidad de su trazado y pidiendo la introducción de mejoras.

Y es que el número de víctimas mortales se ha incrementado este año respecto al anterior en dicha carretera, una circunstancia que los expertos atribuyen, además de a la falta de inversión en la carretera nacional --dependiente del Ministerio de Fomento-- a la mejora de la situación económica, que implica una mayor actividad en el transporte. El veto a los camiones en el tramo entre Nules y Orpesa, de 40 kilómetros, tampoco se ha revelado como una medida efectiva. H