115.531 euros al día, 3,4 millones al mes y 40,8 millones al año. Es lo que, aproximadamente, dejarán de pagar los camiones que circulen por el tramo de la AP-7 de Castellón a partir del 1 de enero, cuando finalice el periodo de concesión a Abertis y conducir por la carretera sea gratuito, después de que pase a ser gestionada por el Gobierno central.

La autopista a su paso por la provincia soporta en la actualidad la circulación de 6.583 camiones al día, como marca la IMD (intensidad media diaria) publicada por el Ministerio de Fomento. Las tarifas aplicadas por la concesionaria indican que, de Moncofa a Vinaròs, este tipo de vehículos pagan 17,55 €, un importe que en el 2020 eliminarán.

En este sentido, hay que recordar, como ha publicado Mediterráneo, que la puesta en marcha de las bonificaciones al tráfico pesado desde la frontera con Cataluña hasta Torreblanca --en dos fases, la primera en el 2018 y la segunda en abril de este año-- ha hecho que el tráfico de camiones se haya incrementado casi un 20% en solo dos ejercicios.

Desde la patronal castellonense no saben calibrar todavía el impacto económico que tendrá la gratuidad para las empresas de transporte de la provincia, pero se prevé importante.

impacto // Así lo confirma Manuel Monfort, administrador de Transportes Monfort, que cuenta con 130 tractores (cabezas de camión): «Es una medida que nos va a suponer un importante ahorro económico al no tener que pagar los peajes. Va a ser muy positiva». Monfort apunta otro aspecto que, al margen del factor económico, también va a resultar muy beneficioso. «La liberalización de la autopista hará que se vacíe de tráfico pesado la CV-13 --vial que une Cabanes con Torreblanca--, que no está diseñada para este tipo de vehículo y es muy peligrosa», manifiesta.

No obstante, todas las fuentes consultadas coinciden en que no se prevé que haya peligro de colapso en la vía, aunque «seguro que habrá un gran trasvase de turismos desde la CV-10», detalla José Vicente Beltrán, gerente de Transportes Pitarch.

Y es que las bonificaciones han hecho que los camiones opten en masa por la AP-7, por lo que el incremento no será significativo, tal y como manifiestan desde la patronal. Asimismo, según los datos de Automovilistas Europeos Asociados, el vial está preparado para acoger 4.000 vehículos por carril a la hora, según su portavoz, Mario Arnaldo. Un nivel de tráfico que está muy lejos del que acredita en la actualidad la AP-7 a su paso por Castellón, por donde transitan de media 23.390 coches y camiones al día.

accesos // En lo que sí que se prevé más problemas es en los accesos a la carretera, ya que los actuales no responden a las necesidades futuras. Es por ello que la Conselleria de Obras Públicas propuso en la anterior legislatura la construcción de hasta 10 entradas nuevas en la Comunitat, tres de ellas en Castellón (en Vila-real, Benicàssim y Vinaròs). El objetivo que persiguen es que los vecinos de municipios que no tengan un acceso cercano no deban desplazarse tantos kilómetros para acceder a la autopista.

Año y medio después de que la entonces consellera María José Salvador presentara la propuesta, no hay novedades respecto a la viabilidad de la misma. Ello depende una negociación con el Ministerio de Fomento que, por el momento, no se ha producido. De hecho, todavía no se ha establecido la comisión bilateral entre el Gobierno central y la Generalitat que debe determinar si se construyen o no.