El artista de Burriana Vicente Traver Calzada fue testigo ayer de la instalación de los dos lienzos que completan el imponente conjunto artístico del altar mayor de la concatedral de Santa María de Castellón. Traver Calzada estuvo acompañado por el obispo de la diócesis de Segorbe-Castellón, Casimiro López; el presidente de la Diputación, Javier Moliner; el diputado de Cultura, Vicent Sales, y la portavoz del grupo municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco.

Moliner explicó que la institución provincial que preside lleva colaborando desde el 2014 en todas las fases de desarrollo de este gran conjunto artístico que conforma el retablo en la concatedral. «Con la instalación de estos dos imponentes lienzos completamos el proyecto que iniciamos hace seis años cuando decidimos que el talento de un artista excepcional como es Traver Calzada, con el que tenemos el lujo de contar en esta provincia, contribuyera a enriquecer aún más el patrimonio sacro de nuestra ciudad», resaltó.

En ese sentido, añadió que «los bienes sacros son motivo de orgullo para todos los vecinos. El objetivo era intentar aportar a la concatedral una obra única como es este retablo tan ansiado». «Tras finalizar las obras de reconstrucción del templo, encontramos una oportunidad para dejar un legado de patrimonio provincial en un lugar histórico», subrayó. «Eso llevó a comenzar a trabajar desde hace cuatro años con Traver Calzada, ubicando cada año uno de los cuadros. A partir de ahora serán aportaciones de uno anualmente, y en este 2019 tenemos la ocasión de incorporar dos, que junto con los dos restantes completarán el gran retablo central de la concatedral», concretó.

«Ha sido una colaboración anual, de en torno a 30.000 euros, que era lo que la Diputación venía gastándose anteriormente en la adquisición de obra pictórica», manifestó Moliner.

Por su parte, el artista Vicente Traver declaró que «es un gran sueño que estos lienzos se ubiquen en la concatedral junto a los otros dos. Los nuevos hacen referencia a las Bodas de Caná y al Niño Jesús perdido y hallado en el templo con los doctores de la ley».

La iniciativa forma parte del compromiso del equipo de gobierno provincial con la puesta en valor del patrimonio sacro como un importante recurso para la dinamización turística y cultural. Un ejemplo de ello ha sido la recientemente concluida exposición la Llum de la Memòria en Caudiel y Jérica.