Trece municipios se han sumado al plan Edificant de la Conselleria de Educación para construir o rehabilitar colegios en su primer mes de funcionamiento en Castellón. Son, no obstante, apenas una tercera parte de los 30 que han pedido cita con los responsables de la administración educativa autonómica, y se esperan más. Lo dijo ayer en Castellón el conseller de Educación, Vicent Marzà, en su visita a los colegios Soler i Godes y Castalia para ver en vivo las obras de Xabier Anunzibai e Issaac Malhow, respectivamente en el proyecto Pintaescola, que ha vestido 12 centros de la capital, acompañado por la vicealcaldesa, Ali Brancal, y los ediles de Compromís Enric Porcar, de Educación; y el portavoz, Ignasi García.
La capital, Almassora, Burriana, Vinaròs, Borriol, Alcalà de Xivert, Soneja, Cortes de Arenoso, Sant Mateu, Peñíscola, Santa Magdalena, Navajas y Tales han puesto su maquinaria administrativa, en mayor y menor medida, al servicio de la tramitación de unos 40 proyectos, para «dar más agilidad a los procesos administrativos cara a ejecutar las actuaciones que cada municipio considera prioritarias, sea para ampliar los centros, reformarlos o levantarlos de cero». «La intención es que se sumen más», dijo.
Marzà, que tildó el plan de «una nueva herramienta» tanto para «poblaciones grandes, como la capital, o más pequeñas, como Cortes» para «avanzar, con los recursos de la Generalitat, pero con más manos para activarlos». «Y tanto si tienen los medios técnicos como si no, los podrán externalizar y contratar e incluirlo en las partidas, sin hacer tapón en la administración municipal y con todas las medidas jurídicas y técnicas avaladas por los interventores y la Abogacía de la Generalitat», explicó el conseller.
Marzà señaló que «todos los municipios con los que nos hemos reunido se han adherido, porque la realidad es que la mitad de las infraestructuras educativas tenían necesidades; se han hecho cosas, pero no es suficiente, con lo que las manos de los ayuntamientos son esenciales».
MÁS CONTROL DE LES CORTS //
En paralelo, el pleno de Les Corts aprobó ayer instar al Consell a que «imprima un ritmo ordenado y continuo» a las inversiones del plan, y que presente ante la Cámara «informes semestrales sobre la ejecución». Además, la moción aprobada reclama a la Generalitat que «no haga desestimiento de sus responsabilidades» y adopte las medidas necesarias también para los municipios que no se quieran adherir.
