El tribunal calificador del proceso de selectivo para la provisión en propiedad de la plaza de director de la Banda Municipal de Música de Castellón se reunió ayer por la mañana para estudiar los dos recursos presentados por los dos candidatos finalistas al puesto que quedarían en bolsa de trabajo según la propuesta hecha por el tribunal el pasado 5 de octubre, que dio por ganador del proceso a Marcel Ortega.

Según explicaron fuentes del equipo de gobierno, el tribunal empezó a evaluar las reclamaciones de Ángel Martínez y de Beatriz Fernández, pero todavía no las ha resuelto y no se pronuncia sobre si acepta o no y en qué medida las alegaciones, tampoco se sabe cuando las resolverá.

Según las calificaciones del tribunal, Martínez quedó segundo en la oposición y este impugnó el proceso al considerar que hubo «filtraciones», «incorrecciones en las calificacciones», «falta de originalidad en las propuestas», además de «la celebración de una prueba a puerta cerrada», por lo que presentó la reclamación por entender que la resolución «es contraria a derecho y lesiva para mis intereses», y solicita al tribunal proponer su nombramiento «por ser el único que ha superado la oposición o, subsidiariamente, el que ha obtenido mayor puntuación para ocupar el puesto».

Fernández, por su parte, reclamaría por entender que no se ha calificado correctamente su experiencia y formación presentada.

Retrasos

Con todo, se dilata el proceso para cubrir en propiedad la plaza de director de la Banda de Música de Castellón, cuya toma de posesión del ganador de la oposición estaría prevista para finales de octubre, probablemente el 26 de octubre. Mientras, esta semana ya ha tomado la batuta un nuevo director invitado, Rafa García, quien fuera candidato también a esta oposición.