El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha confirmado la orden de la Conselleria de Educación que regula la creación de aulas experimentales de Infantil de dos años en colegios públicos de la Comunitat. En Castellón este curso hay 11, que escolarizan a casi 200 niños en Castellón, Vila-real, Burriana, la Vall y Vilafamés.
La Sala de lo Contencioso Administrativo ha desestimado el recurso de la Federación de Centros de Enseñanza de Valencia (Feceval), a quien impone costas, contra la orden 7/2015. La parte recurrente invoca «falta de información a los colectivos afectados, vulneración del derecho de competencia y discriminación con los centros privados y los públicos no incluidos en la orden».
La Generalitat rechazó que hubiera competencia desleal al considerar la educación como «un servicio público esencial».
El TSJCV, al respecto, no observa vicio alguno que pueda invalidar la orden impugnada.
El conseller, Vicent Marzà, indicó que el fallo judicial «demuestra una vez más la fundamentación jurídica y pedagógica de las propuestas de la Conselleria». «Lamentablemente, hay a quien le interesa hacer ruido amenazando con que recurre judicialmente las políticas educativas, pero hoy por hoy se está demostrando que el cambio educativo está bien fundamentado, ya que nuestros planteamientos responden a una manera de ver la educación en consonancia con el Pacte del Botànic», indicó.
El alto tribunal «no aprecia arbitrariedad» en el hecho de que los centros indicados para su implantación sean públicos, al considerarlo acorde con las competencias autonómicas, a las que les corresponde asegurar la cobertura de las necesidades educativas, proporcionando una oferta adecuada de puestos escolares.
