La Agencia Valenciana de Turismo unió ayer cocina creativa, artesanía y diseño mediterráneo en una jornada sobre Foodxperience, una cita cuyo objetivo fue explorar sinergias y oportunidades entre profesionales del diseño valenciano, artesanos, cocineros y hosteleros. El secretario autonómico, Francesc Colomer, asistió a la cita y reivindicó la necesidad de fortalecer la gastronomía, pues afirmó que en un plato «se dan cita las grandes credenciales de un territorio».

Y es que, indicó, cara al turismo los negocios de restauración deben conseguir «trascender al placer de comer» y lograr «mezclar tradiciones, productos, innovación y creatividad».

En las jornadas, celebradas en el Centro de Turismo de Castellón, participaron estudios de diseño como Papila, Vitale o Cerámica a mano alzada y representantes de la cadena NH Hoteles y los restaurantes Relevante y Cal Paradís, regentados por los conocidos chefs Carlos Monsonís y Miguel Barrera, respectivamente.

Por otro lado, el secretario autonómico destacó que las previsiones que maneja su departamento apuntan a que la Comunitat Valenciana recibirá este verano, «de junio a septiembre, cerca de 4,1 millones de turistas internacionales, lo que supone un aumento del 4% frente al verano del 2017». Según Colomer, «el buen balance del primer cuatrimestre apunta a que la temporada alta será mejor que la del año pasado».