Los miedos del sector turístico, que preveía un posible descenso en el número de personas que iban a visitar la provincia este verano, se van desvaneciendo paulatinamente. De momento, parece seguro que, como poco, se igualarán las cifras de ocupación del año pasado; y es probable que incluso lleguen a mejorarse.

Las estadísticas de pernoctaciones hoteleras del mes de julio publicadas ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) apuntan ya en esta dirección. En dicho mes, Castellón recibió a 166.187 turistas que optaron por este tipo de establecimiento alojativo, por los 154.667 del mismo periodo del año pasado.

Un incremento del 7% al que han contribuido también los extranjeros, que en julio llegaron en más cantidad que el año pasado (22.371 por 20.628). Una buena noticia, ya que las previsiones de Turisme Comunitat Valenciana apuntaban un posible descenso en la llegada de este colectivo cara a este verano. La mala noticia es que, de nuevo, significa un porcentaje muy reducido respecto al número total de turistas, escasamente un 13,4%.

Estadísticas, en definitiva, que diluyen amenazas como la pujanza de destinos como Turquía o Egipto --Castellón se benefició en su momento de la inestabilidad política de estos países-- o de otros enclaves españoles. Desde Ashotur, su gerente, Luis Martí, cree que el incremento en la ocupación a final del verano en todas las modalidad alojativas «se situará entre el 2 y el 3%».

Orpesa y peñíscola // El representante de la patronal castellonense apunta a «Orpesa y Peñíscola» como los destinos que mejor se están comportando este verano respecto al anterior, «y el interior está más lleno que otros años». En Benicàssim también parece que las cosas van viento en popa. La concejala de Turismo, Cristina Fernández, dio a conocer ayer que en julio se registró un 1% más de ocupación en hoteles que el año pasado (74%). En agosto, añadió, las pernoctaciones ya rozan el 85%.

El presidente de la asociación hotelera Altur, Alexis de Pablo, reconoce que «nadie hubiera vaticinado hace unos meses estas cifras». «El mercado turístico es sensible y tiene vaivenes, por lo que es difícil hacer pronósticos», indica el responsable del Hotel del Golf del Grau de Castelló.

Tanto desde Ashotur como desde Altur explican que la ocupación no llegará en ningún caso a los niveles del 2017, cuando hubo una afluencia de turistas calificada como «excepcional».