Castellón aún tiene margen de mejora en posicionamiento y visibilidad a nivel turístico y lo debe hacer a través de la «diferenciación». Es el diagnóstico de la situación del sector que hizo ayer el secretario de Turisme Comunitat Valenciana, Francesc Colomer, durante su intervención en el desayuno empresarial organizado por Mediterráneo y Bankia en el hotel Jaime I de Castelló, con el título Los retos del turismo en la Comunitat Valenciana. El encaje de Castellón. ¿Hacia dónde vamos?

Colomer desgranó las claves de un segmento económico que «significa el 14% del PIB de toda la Comunitat» y que «es la respuesta a una provincia que necesita refundar su economía más allá del azulejo y la naranja». «Muchos compartimos que Castellón es una realidad inacabada y desconectada», detalló, «pero no podemos estar en el bucle de lo que podríamos ser y no somos».

destino nuevo // Para el responsable autonómico de Turismo, las iniciativas que se pongan en marcha en el sector tanto a través de las administraciones como del sector público deberían tender a la «especialización y a la tematización, no a lo estándar». «Podemos irrumpir con la fuerza de lo nuevo», apostilló. Asimismo, cree que no es recomendable competir en precios, «porque siempre habrá alguien que ofertará su producto más barato que tú».

No obstante, el benicense advierte de que «los milagros no existen», por lo que apuesta por seguir con el trabajo que llevan a cabo junto a los empresarios de formación de personal en los CdT, los planes de gobernanza, seguir los dictados de la marca de calidad Sicted... «Hay que superar el amateurismo», resumió.

Lazos con València

También ve clave aprovechar la cercanía de la provincia con València, que permitiría venderla en los mercados como «València-norte», al igual que «las localidades de Cataluña hacen con Barcelona. Además, su saturación lo favorece y podemos aprovechar la llegada allí de grandes transatlánticos». En este sentido, apuesta por unir el nombre de Castellón a la marca España Global, el organismo que está encargado de fomentar la imagen del país a nivel nacional.

Colomer cree que otro de los hándicaps que pesa sobre el sector en la provincia es la falta de un convenio colectivo, que considera «fundamental» para crear mejores condiciones de trabajo. «Creo que no queda demasiado para que se firme», añadió.

«Estamos en un momento de cambio absoluto. Es la segunda edad de la máquina, marcada por la robotización y el internet de las cosas. Lo cambiará todo otra vez a mucha velocidad», advirtió Francesc Colomer.