Los rechazos en los puertos europeos de cítricos por estar infestados con plagas siguen al alza. La Unió de Llauradors denuncia que solo hasta el mes de julio, según los datos oficiales, se habían producido 151. Casi tantos como los 164 registrados en todo el 2019. El país que lidera esta estadística es Argentina, con 117 casos. La mayoría, 78, fueron en julio, cuando en el mismo mes del año pasado no tuvo ninguna. Todas las del 2019, que fueron 21, se concentraron entre agosto y octubre.

Del mes recién finalizado, el 91% de casos tienen procedencia argentina. Las plagas con más rechazos son las temibles de la mancha negra o la cancrosis, que todavía no han entrado en la citricultura de la Unión Europea.

Sudáfrica, en el inicio de su campaña de exportación a la UE, ya lleva cuatro interceptaciones este año. Tres de ellas venían con la devastadora Thaumatotibia leucotreta o falsa polilla. La formación agraria advierte de que la llegada de estas enfermedades sería letal para la citricultura valenciana , ya que se convertiría en endémica, como ya ocurre con el cotonet.

PROPUESTA / La Unió ve necesario que antes de suscribir la firma definitiva de cualquier acuerdo comercial habría que auditar los países que no puedan garantizar la sanidad vegetal de los cítricos europeos. En estos momentos se encuentra pendiente de ratificación el acuerdo de la UE con Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela) y la entidad reclama tener en cuenta el asunto de las plagas.

El secretario general de la Unió, Carles Peris, exige «protocolos rigurosos en el control de las importaciones de terceros países» y que las autoridades comunitarias se planteen «las inspecciones en origen y el tratamiento de frío para evitar riesgos innecesarios antes de salir contingentes». Y avisan de que si hay dejación de funciones de las autoridades competentes están «dispuestos a ir a los tribunales para exigir daños patrimoniales».