La Unió de Llauradors y el resto de organizaciones que componen la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos han decidido "tomar cartas en el asunto" ante la crisis que padece el sector citrícola y por ello han convocado una reunión urgente de ámbito estatal a la que ha invitado a todas las Organizaciones Profesionales Agrarias, cooperativas y exportadores con objeto de analizar la situación y emprender acciones conjuntas.

Para esta organización, "el momento requiere la acción conjunta de todas las organizaciones profesionales agrarias, ASAJA, COAG, UPA y Unión de Uniones, Cooperativas Agroalimentarias, FEPEX y el Comité de Gestión de Cítricos para reclamar medidas de recuperación del sector". En este sentido la organización considera que "las propuestas que plantea son asumibles por todos y por eso planteamos la celebración de una reunión de coordinación de todos lo antes posible porque estamos convencidos que hay que plantear propuestas de futuro dirigidas al Gobierno central y a la Comisión Europea, ya que dada la gravedad de la situación se requiere la intervención de ambas autoridades".

Según la Unió, en la primera parte de la campaña citrícola se han producido ya unas pérdidas sólo en la Comunitat Valenciana -mayor zona productora y comercializadora del Estado- de 130 millones de euros para los productores, como consecuencia en un 65% -85 millones de euros- de la anómala situación de mercado provocada por la masiva presencia de fruta procedente de terceros países -fundamentalmente Sudáfrica, pero también otros- en los lineales de los supermercados europeos hasta mitad de noviembre.

"Miles de toneladas de mandarinas españolas -sobre todo satsumas y clementinas- se han quedado en los árboles esta campaña sin recoger al quedar desplazadas de los mercados europeos por la saturación de cítricos de estos países terceros, como Sudáfrica".