Una movilización convocada ayer por colectivos animalistas en la capital de la Plana en protesta por el uso de galgos y otras razas de perros para cazar ha provocado la reacción de la Federación de Caza de Castellón, que acusa a los manifestantes de «mentir a la sociedad con cifras falsas».

Unas 300 personas, según la organización --aunque los cazadores reducen esta cifra a 80--, partieron en la mañana de ayer desde la plaza Cardona Vives junto a sus perros, en dirección al parque Ribalta. Allí se leyó un manifiesto en el que se denunciaba que en otros países de la UE el uso del galgo estaba prohibido, y se alertaba de que muchos de ellos eran sacrificados o abandonados.

La movilización, que se produjo al mismo tiempo en otras 34 ciudades españolas, fue organizada por No a la Caza y contó con la participación de representantes de Manada Feliz y Pacma.

Esta protesta encontró la respuesta del presidente de la Federación de Caza de Castellón, Antonio Museros, quien explica que en la manifestación se vieron pancartas en las que se denunciaba el abandono de más de 50.000 galgos, «cuando la realidad, y según datos del Seprona correspondiente al 2017, el número de real de galgos abandonados es 61».

Museros afirmó que los cazadores se preocupan del bienestar de sus animales, «e incluso en la provincia se han dado casos de cazadores que han perdido la vida por proteger la de su perro».