Los vecinos del Grupo Lourdes de Castellón, a través de su asociación vecinal, La Aduana, han mostrado una vez más su indignación ante la dejadez de las autoridades competentes en el mantenimiento de los márgenes de la vías del ferrocarril. Además, a la proliferación y crecimiento sin control de vegetación a lo largo de los laterales de las vías, se une ahora la sequedad inevitable del periodo estival.

Estos barrios periféricos del sur son la única zona de Castellón donde no se soterraron las vías a finales del siglo pasado y que, por lo tanto, su mala conservación puede suponer un peligro para el barrio, sobre todo por la cercanía de alguna viviendas a las vías, apenas a escasos centímetros.

El portavoz de la Asociación Vecinal ha recordado que, en los últimos meses, ya pusieron la situación en

conocimiento de Adif y de la Subdelegación de Gobierno, sin que al parecer esto haya surtido ningún efecto. “Mientras todos hablan de inversiones millonarias para el AVE, el Corredor Mediterráneo o la conexión con el Puerto, el Estado no invierte en algo tan sencillo como mantener las infraestructura existentes en buen estado, ni siquiera cuando suponen un peligro para nuestra población”, ha comparado el portavoz de la Asociación, Rafa Serrano.

Es por realidades como esta que la Asociación Grupo Lourdes-La Aduana ha puesto en marcha durante el

último año, junto a otras asociaciones de los barrios periféricos, una campaña de reivindicación de los Barris del Sud. “Luchamos juntos por un trato digno de las administraciones hacia nuestros barrios, nos hemos sentido abandonados durante demasiado tiempo”, ha explicado Serrano.