La nueva normalidad llega también a lugares tan emblemáticos y tradicionales de la vida cotidiana como el Mercado del Lunes de Castelló. Dicho recinto ha reabierto este lunes sus puertas en el Recinto de Ferias y Mercados con un centenar de puestos de alimentación para respetar las medidas de seguridad.

Cabe destacar que las paradas de ropa lo harán a partir del 6 de julio. La decisión se produce después de que el pasado 29 de mayo el Ayuntamiento de Castelló recuperara este espacio tras la liquidación de la concesionaria y asumiera la gestión y organización del tradicional mercado.

Con vistas a que hoy esté funcionando todo de la mejor forma posible, el espacio fue desinfectado el pasado domingo para garantizar "las máximas garantías sanitarias" en la reapertura del Mercado del Lunes. Varios operarios se encargaron de realizar las labores de desinfección integral del espacio, fumigando las zonas comunes, mientras que también se actuó en los cuartos de baño.

Medidas de limpieza extraordinarias

Durante la celebración del mercado habrá limpieza continua de los baños y todo el recinto se limpiará y desinfectará de nuevo, recogiendo también los residuos generados, cuando desmonten las paradas. El concejal de Innovación Comercial, David Donate, y el edil de Reciclaje y Limpieza, Ignasi Garcia, supervisaron los trabajos de desinfección. "La ciudadanía podrá acudir al tradicional mercado de Castelló para poder adquirir productos de proximidad y de calidad", explicó Donate, al tiempo que indicó que se ha hecho un "gran esfuerzo para garantizar las medidas de seguridad y sanitarias y, así, los vendedores podrán montar tras no poder hacerlo desde el 12 de marzo". El espacio también estará operativo el día de Sant Pere, pese a que es festivo.

En la misma línea se pronunció el concejal de Reciclaje y Limpieza, quien puso en valor que los mercados de lunes y del Grau de Castelló son "muy importantes para reforzar la red alimentaria de proximidad y apoyar a la producción autóctona".

En el mercado se garantiza la distancia entre puestos de dos metros, mientras los clientes deberán respetar 1,5 metros entre usuarios y llevar mascarilla.