El Ayuntamiento de Vila-real autorizó ayer el pago de cerca de medio millón de euros correspondiente a facturas de proveedores, la mayoría empresas locales y del territorio, que realizaron sus trabajos o prestaron servicios para el consistorio recientemente.

El abono asciende a 494.114 euros a un total de 174 empresas, de las que prácticamente el 80% (137) son mercantiles de la provincia, mayoritariamente locales. Las facturas abonadas corresponden a áreas como servicios públicos, mantenimiento de espacios y edificios públicos como parques y jardines, deporte y salud, atención social, cultura, actividades de promoción económica, o tratamiento y gestión de residuos, entre otras cuestiones.

En el contexto de crisis sanitaria actual, los responsables de Vila-real apuestan por «redefinir contratos de servicios que realizan empresas para, siempre que legalmente sea viable y que la actividad se pueda prestar durante el estado de alarma, no tener que suspenderlos, con el consiguiente perjuicio que esto puede ocasionar en el empleo y la economía locales», subraya el alcalde de la ciudad, José Benlloch.

El Ayuntamiento cerró el cuarto trimestre del 2019 con un plazo medio de pago a proveedores de 13,16 días, según consta en la documentación remitida al Gobierno central. Buen dato, pues esta cifra supone una reducción de más de 16 jornadas respecto al trimestre anterior --en el tercero del 2019 fueron 29,26 días-- y fue también el mejor registro del año pasado, que arrancó con 16,98.

El portavoz del equipo de gobierno, Javier Serralvo, apunta que «aunque a veces resulte difícil por la herencia del Partido Popular, el pago a autónomos y empresas lo antes posible es prioritario, como lo son también los servicios sociales», subraya.