La evolución del empleo en Castellón sigue en caída libre como consecuencia de la emergencia sanitaria por el coronavirus. Si el mes de marzo fue considerado como el peor de la historia, con 3.176 personas que entraron en las listas del paro, en esta ocasión hay que sumar otras 4.003 en abril, afectado de lleno por las medidas del estado de alarma. Así lo reflejan las estadísticas hechas públicas ayer por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

A las 7.179 personas de este periodo negro para la economía hay que añadir las 35.536 personas que están perjudicadas por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en la provincia. Por tanto son 42.715 los asalariados que han sufrido los efectos de la pandemia, ya sea al perder su puesto de trabajo en los dos últimos meses, o bien por quedar afectados por una suspensión de sus contratos, con lo que reciben una prestación pública.

CIFRAS / Respecto a las cifras que cada mes aporta el servicio estatal de empleo, SEPE, en estos momentos hay inscritas un total de 46.611 personas, con un incremento del 9,39% con respecto a marzo, y un aumento de demandantes del 18,96% en el interanual. En cuanto a la Comunitat, la subida fue de 38.115 personas, un 9,49% más que en marzo, con lo que la cifra total de desempleados se situó en 439.942, mientras que en términos interanuales aumentó en 74.801 personas, un 20,49% más. En el conjunto nacional son 3.831.203 los valencianos sin un trabajo.

De las personas en situación de desempleo en Castellón, 19.702 son hombres y 26.902 mujeres, mientras que la cifra de extranjeros es de 12.293. Por edades, la peor parte se la llevan quienes tienen 45 años o más, al concentrar casi la mitad de los demandantes, con 22.464 personas.

Si hablamos de sectores, el principal damnificado es el de servicios, con 31.964 personas. Desde mediados de marzo todos los locales tuvieron que echar el cierre, y no será hasta el día 11, con el arranque de la fase 1 de la desescalada programada por el Gobierno, cuando empiece una reapertura parcial, marcada por la reducción de los aforos.

La industria contabiliza 5.590 parados, 641 más que en marzo, lo que supone una moderación en la pérdida del empleo, y 3.821 personas integran la construcción. En estos dos segmentos de la economía, se vieron afectados por el cierre de la primera quincena de mes, cuando se decidió parar la actividad.

Respecto a la agricultura, hay 1.794 inscritos, con un aumento de 130 personas. Este sector no se ha detenido al estar considerado como prioritario, pero la subida se explica por la finalización de la campaña citrícola. Además 3.442 apuntados a las listas forman parte del grupo de gente que no tenía empleo anterior.

CONTRASTE CON LA EPA / Los datos publicados ayer suponen un contraste con la publicación de la encuesta de población activa (EPA) correspondiente al primer trimestre de este año. En este caso, los ERTE no afectan a la estadística, por lo que contabiliza 38.700 parados, la cifra más baja en un arranque de año desde el pico del 2013. Son 700 personas menos que en mismo periodo del 2019. Esto se debe fundamentalmente a enero y febrero, antes de que llegara esta crisis.