Quince voluntarios de la oenegé Youcanyolé viajaron ayer hasta Ghana tras cuatro días de incertidumbre y trabajo institucional a contrarreloj ante el veto gubernamental del país africano a darles los visados. Tenían que ser 19 e irse el viernes, pero la documentación no llegó y cuatro se quedaron finalmente en tierra.

El presidente de la entidad, el doctor Miguel Medina, explicó ayer que «en esta expedición el reto es desparasitar a entre 3.000 y 4.000 niños, en una campaña que se hace dos veces al año, y montar un hospital de campaña, una especie de urgencias», desde el que atienden «a más del doble de esa población en todas las especialidades». Los médicos, enfermeros y responsables de logística estarán en Acra hasta el día 26, pese a las «reticencias del Gobierno a la entrada de cooperantes, para que no se visibilice la situación que vive la población».