El terreno de juego de Castalia ha pasado del 3-0 del domingo a La Nucía, a albergar la esperada junta general de accionistas del CD Castellón. Una junta que debía haberse celebrado el domingo por la mañana (y el partido por la tarde), pero el temporal de lluvia y viento de la semana pasada impidió que la sustitución de las torres de iluminación estuviera a punto para el encuentro, que pasó del domingo por la tarde al mediodía y la junta, al lunes.
La asamblea ha arrancado con más de media hora de retraso sobre el horario previsto y con apenas medio centenar de socios/accionistas.
Después de los preámbulos y de cuestiones técnicas, el consejo de administración del CD Castellón ha trasladado su propuesta para el voto telemática así como la disposición de un mínimo de 100 títulos.
Números rojos sí o sí
En cuanto al presupuesto, el órgano rector del Castellón ha explicado un presupuesto de 2,5 millones de gastos y de 1,8 millones de ingresos, lo que arrojaría un déficit superior a los 600.000 euros. Eso en el caso de que los albinegros no disputen los play-off de ascenso; en ese caso, Montesinos aún espera números rojos: unos gastos por 2,6 millones y unos ingresos de 2,2 a 2,3 millones, con un desfase de entre 350.000 y 350.000 euros.
Además, Montesinos reiteró su compromiso con el proyecto, independientemente de si el Castellón juegue la promoción.
Más datos económicos ha ofrecido Montesinos. Reconoce que ha habido embargos producto de sus deudas con Hacienda y Seguridad Social, aunque dice que ya tienen un acuerdo con esta última desde hace meses y que con la Agencia Tributaria, a la que adeudan 275.000 euros, están en conversaciones. En ambos frentes, responsabiliza al grupo de José Miguel Garrido de no haber hecho frente a los requerimientos cuando el madrileño estaba al frente de la gestión del club. Ha aprovechado Montesinos también para asegurar que, desde su entrada, han desembolsado 3,5 millones de euros para normalizar el club.
