Nada como ganar para que afloren las lecturas positivas. Con el 4-0 a Las Palmas el Castellón le dio un mordisco a la clasificación, acercándose a solo dos puntos de la zona de permanencia, y lo hizo además consiguiendo uno de los objetivos colaterales. El equipo albinegro dejó la portería a cero sustentando el rendimiento defensivo en la nueva base que ha encontrado el entrenador Juan Carlos Garrido. Le dio continuidad en el once pese a la derrota en Girona, y todo hace indicar, tras el trascendental triunfo sobre Las Palmas, que en la próximas semanas continuará apostando por ese mismo bloque.

Así lo dejó entrever el propio Garrido ya en la previa del partido contra Las Palmas, indicando que era el momento de la continuidad sobre el campo y la insistencia en las ideas en las que el cuerpo técnico viene trabajando. Esa apuesta salió enormemente reforzada por el resultado obtenido.

Tanto en la zaga como en la medular, el preparador valenciano ha apostado en las últimas jornadas por mezclar a jugadores poco utilizados durante los meses anteriores con los refuerzos de invierno que ya están disponibles. Tanto en la derrota de Girona como en la victoria de Castalia, Garrido repitió la misma base, con Moyano-Indias-Delgado-Víctor en la línea de cuatro defensiva, por detrás de dos mediocentros complementarios. La medular ha cuajado tras varios cambios, con Josep Señé y Yann Bodiger.

rendimiento // Con esta disposición, el Castellón mantuvo la portería a cero. Mejorar los números defensivos fue la primera y principal obsesión de Garrido cuando tomó el mando del conjunto castellonense. Lo logró a la primera, en el debut en Castalia contra el Sporting (2-0), pero había encajado goles en los otros cuatro partidos disputados, todos ellos perdidos. El sábado volvió a tapiar la portería, la segunda vez desde su llegada, y un hecho nada habitual en lo que va de temporada. No en vano, con Óscar Cano en el banquillo, el Castellón solo dejó la puerta a cero en tres de los 21 partidos de Liga disputados. Un pobre balance defensivo que supuso un lastre clasificatorio.

Desde que se produjo el relevo en el banquillo, el nuevo entrenador incidió en la necesidad de ganar competitividad defensiva, tanto en la estructura táctica del equipo como en los duelos individuales en la zaga, condición indispensable para comenzar una dinámica positiva de resultados. De esos tres partidos sin encajar con Cano, uno fue precisamente contra el próximo rival de los albinegros. El Leganés visitó Castalia en la jornada 4 y perdió 2-0. Tampoco marcaron al Castellón el Zaragoza y al Albacete, en las jornadas 16 y 18, respectivamente. El conjunto orellut visitará el sábado el estadio de Butarque.