Una oportunidad de mercado. La posible llegada de Josh Pérez al CD Castellón, el delantero estadounidense con ascendencia salvadoreña de 22 años que está libre e interesa al club albinegro, se inscribe dentro de estas peculiares circunstancias.

Está claro que, a pesar de su juventud, Pérez se ha estancado tras un inicio muy prometedor. El dinámico atacante (1,65 metros), que se fue con 15 años a Italia y que llegó a debutar en la máxima categoría del calcio de la mano de la Fiorentina (nada menos que frente al Inter), regresó en 2018 a su país, aunque no ha explotado sus cualidades ni en la MLS (la máxima competición del allí llamado soccer), ni tampoco en la división que está un escalón por debajo (USL), con Los Ángeles FC (no confundir con los Galaxy), ni con los Phoenix Rising, respectivamente. Hay que recordar que ha sido internacional con Estados Unidos en todas las categorías inferiores (sub-17, sub-19, sub-20 y sub-23).

PRUEBA EN ESCOCIA

Josh Pérez está sin equipo desde que, hace justo un mes, rescindiera su vinculación con la entidad californiana, en la que compartía vestuario (y demarcación) con el mexicano Carlos Vela, una de las estrellas de la MLS. Ha vuelto a Europa en busca de un nuevo destino y, de hecho, ha estado varias semanas probando con el Dundee United, histórico equipo que pelea por regresar a la Scottish Premiership, aunque fue cortado. El delantero ha entrado en la órbita del Castellón, que valora su incorporación inmediata, aprovechando su condición de futbolista sin equipo y de sub-23 (Óscar Cano aún tendría hueco en su plantilla).

Está claro que, en el caso de que llegase a Castalia, Josh tendría que adaptarse en un tiempo récord para las 10 jornadas y una hipotética fase de ascenso, pero tiene a su favor el idioma por sus orígenes salvadoreños y ya sabe lo que es jugar fuera de su país (lo hizo durante un lustro, entre los 15 y los 20 años, en Italia).

EL REPASO

Pérez pertenece a una familia muy futbolera (su padre, su abuelo y su tío también han sido jugadores en El Salvador). Dejó EEUU más joven de lo que suele ser habitual y, de regreso a su país, ha estado a la sombra de delanteros internacionales absolutos como el mencionado Vela, el costarricense Marco Ureña y el noruego Adama Diomandé, de ahí que no haya jugado mucho.

El Castellón no tiene la necesidad de reforzar un perfil que ya cuenta con hombres como Alfredo Gutiérrez o Íñigo Muñoz (que no son titulares tampoco), aunque su llegada serviría para aumentar la competencia.