Cevisama 2016 acelera y está respondiendo a las expectativas de los empresarios de Castellón, si bien el certamen también ha certificado las dificultades que se arrastran en dos áreas de consumo claves para el azulejo de Castellón en el ámbito internacional: Rusia y los Países del Este, y los países árabes de Oriente Próximo, consecuencia de la crisis econónica y la devaluación del rublo, y la bajada en la cotización del precio del petróleo por la caída del brent.

Es a grandes rasgos la radiografía que arrojan un primer balance de la feria Cevisama, que ayer llegó a su ecuador y que mañana llega a su punto final, en medio de grandes expectativas.

Según los empresarios consultados por el Periódico Mediterráneo, Cevisama 2016 se está presentando con una de cal y otra de arena. Todos los empresarios consultados, entre los que se encuentran Manuel Rubert, de Natucer; Rafael Fabregat, de Fanal; y Vicente Nomdedéu, de Azteca, ratifican que los grandes ausentes están siendo los clientes rusos. “Han venido muy pocos”, incide Nomdedéu, y los pocos que han venido lo han hecho con ganas de conocer, pero postergando sus decisiones de compra “para más adelante”.

Lo mismo ocurre en el caso de los clientes árabes, “que sí han venido, y están presentes, pero en cantidades inferiores a la edición pasada”, declara el consejero delegado de Fanal, Rafael Fabregat.

Quienes sí están respondiendo, y de manera importante, es el mercado nacional, que no solo está participando masivamente en la que sin duda es su feria de referencia. “No solo están viniendo y conociendo producto, sino que incluso ya piden números y tienen ganas de proponer, planificar y comprar...”, señala Vicente Nomdedéu, director general de Azteca, quien sin embargo insiste en la necesidad de que se active cuanto antes un plan de apoyo a la rehabilitación de ámbito estatal para dinamizar un mercado “que ahora mismo está a años luz de lo que fue” y que necesita de incentivos para potenciar las reformas.

Asimismo, Nomdedéu ratifica que otra delegación que sí está cubriendo las expectativas en esta feria es la de los ingleses, un mercado que crece a un ritmo del 20% y que presenta magníficas expectativas también para este 2016.

Precisamente ayer, la directora de la Oficina Económica y Comercial de España en Londres, dependiente del Instituto de Comercio Exterior (Icex), Consuelo González, destacó que las previsiones para los años 2016 y 2017” es de “mantenimiento del actual nivel de crecimiento”, gracias a que el producto que comercializan las firmas españolas es “muy conocido y reconocido”. Tal es así que todo apunta a que en el presente ejercicio, el valor de las exportaciones al Reino Unido volverán a situarse en los niveles de precrisis. H