Estados Unidos se ha convertido en el gran objeto de deseo para la industria azulejera española. En un contexto internacional marcado por la fuerte competencia y el auge del proteccionismo, el hecho de que el Gobierno de Donald Trump haya apostado fuerte por establecer barreras arancelarias a la cerámica china provoca que este mercado se haya convertido en una perita en dulce para el sector. Tanto es así que varias empresas confirmaron a Mediterráneo que ya trabajan para ampliar su red comercial al otro lado del Atlántico.

Una de ellas es Azteca, que prevé incorporar a nuevo personal en el país para mejorar la llegada en los estados donde más azulejo se consumen. «Es un mercado en el que hemos hecho muchas acciones en los últimos cuatro o cinco años y que ya están dando resultados», apuntaron desde la compañía, cuyos responsables reconocieron que han notado un «repunte de las ventas» en los últimos meses. En el ejercicio 2018 las firmas españolas vendieron por valor de 235 millones de euros a este destino, lo que supuso un crecimiento del 9% que se sumaba a los del 23 y 30% de los dos años previos.

Otras empresas, como las del grupo Pamesa, que ya cuentan con una amplia presencia en Estados Unidos, también están analizando en la actualidad la nueva situación para dar nuevos pasos si lo consideran necesario. Este mercado ha pasado en pocos años de ser un semidesconocido para muchas azulejeras a convertirse en el segundo o el tercero en exportación, prácticamente solo por detrás de Francia y en algunos casos de otro país europeo. Es el caso de APE Grupo, cuyas ventas en el país de Trump ya suponen alrededor de un 10% de su facturación total.

TEMOR A ARANCELES

No obstante, los empresarios azulejeros de la provincia temen que ese aumento del proteccionismo, que en ese caso les abre de par en par las puertas de un mercado potencial de 327 millones debido a los aranceles del 103% que ya tienen que pagar las firmas chinas, se torne en contra en un momento u otro. El presidente de la patronal azulejera Ascer, Vicente Nomdedeu, reconoció en su comparecencia tras la última Mesa de la Cerámica que se abría una situación interesante, pero solo «a corto plazo».

«En el mercado libre hay que ser cada día mejores para fidelizar al cliente no porque otros no puedan vender en el país, sino porque tú eres el mejor», sostuvo. Nomdedeu también advirtió de que en un contexto de guerra comercial e incrementos arancelarios en muchos países, «hay que estar preparado por si eres el siguiente». De hecho, la Administración Trump ya amagó con implantar tasas a la exportación de azulejos españoles y, aunque por ahora el Tile of Spain se salva de la quema, son varios los empresarios consultados que ven con pánico esta posibilidad, que cerraría de golpe el que se ha convertido en el gran mercado de crecimiento para las empresas del clúster castellonense.

Es por todo ello que las compañías consultadas presentes en Cersaie apuestan por aprovechar el certamen italiano no solo para tratar de ganar cuota en Estados Unidos, sino también para consolidar los mercados europeos. «Son los destinos que más trabajados tenemos, pero no podemos descuidarnos», apuntó el jefe de Exportación de una de las firmas punteras de la provincia.