Calidad, originalidad e innovación es lo que ha mostrado Bestile en cada una de las jornadas de la feria de Cevisama. Unas características adheridas a su marca que le han servido para exhibir un producto diferenciado. «Y eso es lo que busca el público: una propuesta especial», asegura el director de la firma, Celso López. Así, se despiden de la feria con un balance «muy positivo, tanto en cantidad de visitantes como en la calidad de los compradores», manifiesta López.

Entre su amplia gama de colecciones destaca Zurbarán, un reactivo de litio que, tal y como revelan desde la empresa, «ha sido todo un éxito por su encanto y su belleza natural».

También la serie Chevron, que permite atrevidas combinaciones, y su línea hexagonal de productos han tenido gran acogida entre el público asistente. «Son trabajos con brillos únicos. Somos distintos y eso es lo que nos diferencia», explica. Asimismo, López revela que en la estrategia que han llevado a cabo este ejercicio ha primado más la calidad que el tamaño de la cerámica, una línea de trabajo con la que seguirán en la próxima feria de Bolonia, Cersaie.

Y además de la gran aceptación por parte del público, Bestile dice adiós a la feria con su tercer Premio Alfa de Oro, tras los logrados en los años 2008 y 2014. Y es que, tal y como aseguran desde la compañía, son los únicos en el mundo en desarrollar esta tecnología de inteligencia artificial que les ha valido el prestigioso galardón (junto a la empresa Neos Additives). A través de esta innovadora propuesta, se puede plasmar cualquier tipo de imagen en una cerámica, utilizando un perfil estandar. Otro paso hacia adelante que sitúa a la firma como referente.