Los fabricantes de fritas, esmaltes y colores cerámicos llegan a Cersaie con buenos registros en cuanto a ventas y con la constatación de que el mercado español ha comenzado a repuntar en una clara superación de la crisis, según atestigua su presidente, Miguel Ángel Michavila.

-¿Cuáles son las principales cifras y macroindicadores de su sector en este 2017 con respecto al anterior ejercicio?

--En estos momentos tenemos datos de exportación del ICEX correspondientes al segundo semestre y los indicadores son buenos, con un 1,2% de incremento en ventas. Los principales destinos son Italia, China, India, Argelia, Turquía y Rusia. En cuanto a la demanda interna, a falta de datos concretos, es cierto que el volumen de compras está subiendo mucho, lo que es un importante indicador de la recuperación del sector azulejero.

-En el ámbito de la internacionalización, ¿qué papel están teniendo los mercados llamados «tradicionales»?.

--Italia sigue siendo nuestro principal país de destino y en el segundo semestre llevamos vendidos más de 45 millones de euros, con bastante diferencia de China (con 35 millones), India o Argelia. En cuanto al mercado doméstico, que es nuestro principal cliente, su recuperación es una excelente señal, que beneficia a todo el sector cerámico.

-¿Cómo afecta o puede afectar la actual fortaleza del euro con respecto al dólar, una tendencia que, según parece, va a seguir?.

--Como siempre hemos dicho, nos vemos afectados por los cambios, ya que vendemos en dólares y en euros. Sí que es verdad que hay empresas que están más enfocadas a unos mercados que a otros, por lo que, en particular, sí que se verán afectadas en mayor medida por la situación actual.

-El entorno político-estratégico internacional se manifiesta cada vez más complejo. ¿De qué manera puede afectar al sector?

--El panorama político global es complejo y las decisiones políticas y/o económicas en una parte del mundo afectan siempre y de alguna manera al resto. Hay que estar atentos a estos movimientos, aunque estamos acostumbrados a jugar en el mercado global y a tomar decisiones en función de estas variables.

-En este contexto Asia, con sus enormes singularidades, Europa, EEUU, África, Latinoamérica… necesitarían un análisis individualizado, ¿cómo resumiría cada uno de estos entornos?

--En Europa, España e Italia siguen siendo nuestros principales clientes, y son dos países que van al alza. EEUU no es en la actualidad un gran mercado cerámicamente hablando, pues hay escasa producción azulejera, sin embargo, su política afecta al resto del mundo y siempre hay que tenerla en cuenta. Latinoamérica tiene puntos de producción muy importantes como Brasil y México. En el norte de África, Argelia es un destino crucial, junto con Marruecos y Egipto, que debido a sus crisis internas han perdido cuota de mercado en los últimos años. En cuanto a Asia, China e India ocupan los puestos segundo y tercero en el ránking de exportación, y son destinos cruciales hoy, dada su elevadísima producción azulejera.

-El ‘brexit’, ¿conllevará cambios importantes en su sector?

--Todavía desconocemos las consecuencias que puede tener el brexit, pero sin duda afectará a la economía europea y por lo tanto a la internacional. Gran Bretaña no es un mercado importante en cuanto a fabricación de cerámica, pero sí que nos afectará indirectamente ya que sí que es un gran mercado consumidor.

-¿Qué puede decir de los costes de materia prima?, ¿prevén un encarecimiento asumible cara al próximo año?

--La situación mundial está tan agitada que, la verdad, es muy difícil en estos momentos poder prever qué sucederá el próximo año. En este 2017 sí que podemos afirmar que hemos tenido incrementos que han llegado hasta el 70%, como es el caso del cobalto, y otras muchas materias primas que han afectado directamente a nuestros fabricados, tanto a fritas, colores como a tintas.

-¿Cuáles son sus previsiones para este ejercicio?

--Dadas las fechas en las que nos encontramos podemos decir que las previsiones, si sigue la tendencia actual, son de un crecimiento paulatino, tanto en el mercado interno como en el exterior.

-¿Cómo está la situación del empleo en su sector?

--Hemos creado empleo cada año a medida que nos recuperamos de la crisis. Esperamos cerrar el ejercicio también con cifras positivas en este sentido. No hay que olvidar el elevado grado de investigación y desarrollo generado en el sector gracias al creciente número de titulados universitarios contratados y la apuesta por la innovación.

-¿Le preocupa el actual clima político que vive España?

--Es importante que España dé una buena imagen cara a los demás países ya que eso nos beneficia en todos los sentidos y a todas las empresas. Nuestro sector está muy internacionalizado y eso nos hace ver las cosas con una perspectiva mucho más amplia. Lo que sí que estamos acostumbrados es a que haya un marco legal que nos permita poder trabajar con garantías en los mercados en los que nos movemos.

-¿Qué espera de Cersaie?

--Cersaie es en la actualidad la feria cerámica más importante del mundo y en la que algunos fabricantes presentan sus novedades de productos. Nuestro sector está presente con un nutrido grupo de empresas. Todas las ferias son un punto de encuentro con los consumidores de muchas partes del mundo y en los que poder demostrar nuestros desarrollos y nuestras capacidades. La tendencia apunta a que veremos piezas en gran formato con decoración total con inyección digital.