Cerca de 15 personas se han interesado en la iniciativa lanzada por el consistorio, mediante la que los particulares ponen a disposición del Ayuntamiento locales privados que actualmente tienen en desuso. Fue hace poco más de un mes cuando se abrió el registro para poder presentar instancias y, hasta el momento, se han contabilizado algunos posibles inmuebles en el barrio Carbonaire y la carretera Segorbe.

Se trata de un proyecto mediante el cual el propietario de un local cede su uso al Ayuntamiento para que este ponga en marcha iniciativas sociales o de promoción económica y conseguir, así, dinamizar la ciudad. No obstante, “el inmueble siempre será propiedad de la persona que lo cede, aunque durante el tiempo que esté siendo utilizado estará libre de cargas impositivas y gastos corriente”, explica la alcaldesa, Tania Baños. Asimismo, “también será el Ayuntamiento el que asuma los posibles gastos de mejoras o de adecuación”.

En cuanto a cuestiones como la duración de la cesión, actuaciones a realizar y otras “se establecerán en un contrato y, una vez finalice, el local volverá a poder ser utilizado por el dueño, ya que este nunca pierde la propiedad del mismo”. La iniciativa, asegura Baños, “beneficia a ambas partes”. Por una parte, a los propietarios de estas naves porque “no las utilizan y, a través de este proyecto, se ven liberados de unos gastos que en muchos casos no pueden asumir”. Y, por la parte municipal, el Ayuntamiento también saca provecho, dado que “tenemos un déficit de locales públicos y en la actual situación económica no disponemos de dinero para comprar naves o locales donde llevar a cabo proyecto que beneficien a toda la ciudadanía”.

Todavía se pueden presentar instancias, donde hay que notificar la ubicación, metros y características del inmueble. Posteriormente, una comisión de técnicos valorará los más adecuados. H