La Vilavella ha puesto fin a una semana de fiestas que se ha caracterizado por que los vecinos se han volcado en la participación en cualquiera de las convocatorias, ofreciendo un balance positivo, a pesar de los inconvenientes que este año han enturbiado el de-senlace de Festa la Vila.

Alrededor de 400 jubilados acudieron a la comida con la que tradicionalmente se clausura la programación festiva, en el mismo escenario en el que durante las últimas jornadas se han vivido los momentos más intensos y multitudinarios. Recurriendo a la mejor faceta de estas celebraciones, el municipio trató de olvidar la desastrosa tarde taurina a la que asistieron el sábado, cuando los dos toros adquiridos por el Ayuntamiento acabaron desplomados en medio de la plaza a los pocos minutos de su salida.

estudio veterinario// La alcaldesa, Carmen Navarro, comentó que fueron sacrificados ayer, como es preceptivo, en concreto a las 7.00 horas, defendiendo así que no murieron en la calle. De acuerdo con los protocolos habituales, se les realizaron análisis en el matadero para comprobar si su carne podrá consumirse. Una vez culminados estos trámites sanitarios, «desde el matadero remitirán a la dirección taurina el certificado de muerte», donde esperan poder esclarecer por qué manifestaron tanta debilidad nada más salir de los toriles, como para desplomarse y no poder incorporarse de nuevo.

También se pronunció al respecto la portavoz del PP, Inma Traver, que manifestó su deseo de «conocer la verdad» de lo que sucedió en una tarde que llegó a calificar como «dantesca».