Los municipios turísticos no solo se preparan con sus propios medios para luchar contra el top manta mediante la dedicación de efectivos de la Policía Local, sino que también solicitan más implicación al resto de las administraciones. Si Peñíscola dio un paso en este sentido la semana pasada, ahora es Alcalà de Xivert el que reclama medidas similares.

Los cuatro grupos municipales con representación en el Ayuntamiento --PP, PSOE, Compromís y Ciudadanos-- han aprobado en el pleno una declaración institucional en la que reclaman a la Generalitat y el Gobierno de España la elaboración de estudios que evalúen el impacto económico que la venta ilegal en la vía pública tiene sobre el comercio tradicional. La concejala de este área, Alejandra Roca, detalla que con este texto el consistorio quiere «dar apoyo al sector y a los policías locales, que cada verano se ven desbordados por este fenómeno».

Tal y como se hizo en la localidad papal, el punto consensuado demanda «la tramitación de una legislación más enérgica que persiga esta actividad ilegal y permita su erradicación», y reivindica también a los dirigentes centrales y autonómicos «más acción policial contra mafias organizadas respecto al tráfico de personas y productos ilegales».

clara competencia desleal // Los fundamentos de la moción remarcan que los establecimientos constituidos según la normativa vigente deben abonar una serie de gastos que los manteros no asumen, por lo que nunca son capaces de competir en precios.

Otra mención realizada tiene que ver con los altos costes que han de asumir las áreas municipales, ya que resulta «realmente importante la partida presupuestaria que cada ejercicio destinan los ayuntamientos turísticos a seguridad ciudadana», con la adopción de turnos para atajar esta situación en las calles.