El alcalde de Suera, José Pascual Martí, así como la corporación municipal de la legislatura 2007-2011 otorgaron una licencia de obras para construir una casa en la Serra d’Espadà después de contar «con el informe favorable de la Conselleria de Medio Ambiente y Urbanismo, a través del Director General de Urbanismo». Así se desprende de la sentencia que absuelve al primer edil de un delito de prevaricación ambiental de la que ya informó este diario y a la que tuvo acceso ayer mismo.

En ella, se aclara que «la concesión o la denegación de la autorización vienen determinadas por la emisión de un documento vinculante de la Administración autonómica, lo cual significa que si esta dice que es desfavorable, el consistorio debe denegarla; pero, si es favorable, entonces, está obligado a otorgarla». Se ratifican de este modo las declaraciones que hizo el munícipe a Mediterráneo en las que aseguraba que «nosotros contábamos con los informes positivos» y «si en su día no hubiéramos dado el permiso, el afectado también hubiera podido denunciarnos».

ANTECEDENTES / Los hechos se remontan al 30 de enero del 2009, cuando el pleno municipal dio luz verde a la obra. Según se desprendía del escrito de acusación de la Fiscalía, la casa debería de haber sido un inmueble de un agricultor profesional y nunca de una segunda residencia. Sin embargo, en una inspección realizada por el Seprona el 20 de abril del 2010 descubrieron lo contrario. Ante estas circunstancias, el fiscal reclamaba para Martí tres años de cárcel y 12 de inhabilitación para cargo público.

Ahora, la sentencia le exculpa, junto al resto de investigados excepto al dueño del inmueble, al que se condena a 6 meses de prisión y multa de 2.190 euros.