La propuesta de una nueva subida de la tasa que afecta a la recogida y eliminación de basuras por parte del consorcio de residuos de las zonas III y VIII, que incluye a 56 municipios, de los cuales 35 son de las comarcas del Alto Palancia y de la Plana Baixa y el resto, de la zona norte de la provincia de Valencia, ha puesto en alerta a los municipios del sur de Castellón. La situación, denunciada por diversos alcaldes, como los de Moncofa y la Llosa, Wenceslao Alós y Jaoquín Llopis, respectivamente, de la que se ayer hizo eco este periódico, contempla que la propuesta que se elevará al pleno del consorcio de mañana, «lejos de rectificar los incrementos del pasado año, los amplía». De hecho, lamentan que plantean un encarecimiento en las viviendas y almacenes que, sumado al del 2016, supone un aumento del 6,76%, pues el proyectado se sitúa en 1,70 euros por cuota.

Desde Nules hasta Almenara, todas las poblaciones implicadas evalúan estos días la intención económica del ente, que afecta a miles de ciudadanos de ambas comarcas, especialmente, a los comerciantes, ya que el planteamiento inicial implicaría el mismo incremento para los establecimientos de 40 m2 que para los de disponen de más de 100.

En Alfondeguilla, los damnificados anuncian que alegarán contra la medida. Los propietarios de negocios como bares, tiendas, horno y estanco del municipio, gobernado por el popular Salvador Ventura, se han unido para redactar una carta contra una decisión que consideran una «barbaridad». Critican que, con el aumento aprobado en noviembre del 2016 que se ha aplicado durante el presente 2017, algunas tiendas pagarán incluso un 56% más que el año anterior.

MODIFICACIONES

Sin embargo, tal y como comentaron la alcaldesa de les Alqueries, la socialista Esther Lara; o el representante de la Diputación de Castellón, el popular Mario García, se han realizado una serie de modificaciones en los epígrafes para tiendas de comestibles, que reducen las cuotas en función de los metros del local. «Los comerciantes son los más afectados, existe malestar, pero finalmente hay una nueva propuesta de modificación de la ordenanza», comenta Lara, que esperará al pleno de mañana para adoptar una posición.

En términos similares se expresan la primera edila de Almenara, y el munícipe de la Vilavella, Estíbaliz Pérez y Manel Martínez, entre otros alcaldes socialistas que se reúnen estos días a nivel municipal para definir sus posturas. En el caso de Nules, también están en contra de una nueva penalización de la tasa. «Estamos estudiando el tema, pero en la anterior subida ya nos opusimos y votamos en contra. Evidentemente, somos conscientes de que hay acumulada una mala gestión y deben aumentarse los ingresos, pero abogamos por una fórmula que no suponga incrementar el recibo y así lo hemos transmitido en el consorcio», comenta el alcalde del CCD David García.

La propuesta también se ha puesto sobre la mesa en la Mancomunidad del Alto Palancia, que preside el alcalde de Sot de Ferrer, Ramón Martínez, e integra 17 municipios de colores políticos distintos; así como en el Ayuntamiento de Segorbe que encabeza Rafael Magdalena, que ayer todavía no tenía una decisión firme al respecto de su votación en el pleno del consorcio.

«El incremento del año pasado ya fue muy importante y entendemos que ahora deberían congelar la tasa o buscar otras fórmulas», explica Mario García.

RESCATE DE 3,6 MILLONES

La Diputación aprobó en el mes de mayo trasferir 3,6 millones de euros para el ente que gestiona los residuos del sur de la provincia tras acordar otros tres millones para el de la zona norte. La representación de la institución en esta entidad es casi testimonial, con un 10%, pero la medida se tomó al negarse los bancos a financiar al organismo, presidido por el PSOE, «lo que le incapacitaba para garantizar las prestaciones a sus vecinos»», indicaron.