Las collas no defraudaron, y los asistentes al gran desfile de Carnaval de Alcossebre disfrutaron de un gran espectáculo. Tras las celebraciones de la semana pasada en Alcalà, los colectivos festivos desplazaron sus carrozas y disfraces hasta el núcleo costero, de modo que los espectadores tuvieron la oportunidad de deleitarse con unas creaciones basadas en el mundo de la música, caballitos de mar o aves coloristas.

El recorrido salió a partir de las 22.00 horas, en la avenida Blasco Ibáñez, y pasó por las principales calles del centro de Alcossebre. El punto más esperado, y con un mayor número de público, fue el sambódromo de la calle Rench, a la altura del centro médico, en el que la gente de las collas ofreció su combinación de música y baile. Tal y como es costumbre, este evento tiene lugar la semana siguiente de las fechas oficiales de los carnavales, de modo que muchos amantes de los disfraces, venidos desde otras localidades cercanas, pudieron volver a pasarlo a lo grande con esta cita.

Tras el desfile, la carpa instalada en el paseo marítimo fue el marco de una verbena, con la presencia del grupo Revelación, seguida de una discomóvil.

MASCOTAS / El momento más esperado de la jornada llegó por la noche, pero ayer también hubo otras actividades relacionadas con este evento. Una de las más entrañables fue la séptima edición de la fiesta para mascotas, que se desarrolló en la plaza de la Mola. Amos y animales recorrieron la alfombra roja con sus elaboraciones, que incluyeron desde recreaciones de los peces de Buscando a Nemo, a famosos superhéroes o arlequines, entre otros.

Por la tarde, los niños fueron los protagonistas, con el recorrido para ellos, con salida y llegada en la plaza Vista Alegre. Hoy concluyen el programa, con un concurso de disfraces y baile organizado por la asociación de jubilados y pensionistas Sant Benet.