Los Lluïsos tomaron ayer Almassora desde lo alto del campanario. Y es que la 16ª edición de la Pujada al Campanar, organizada por este colectivo, contó como novedad en esta ocasión de un concurso de fotografía que despertó la creatividad de los asistentes con móviles y cámaras.

Decenas de personas divisaron el término municipal desde 40 metros de altura. Vistas privilegiadas con el casco antiguo de la Vila a sus pies, con los huertos de naranjos y el mar en la distancia. Unas imágenes que fueron gentileza de la asociación juvenil que, una vez más, organizó una actividad que une ocio, historia y tradición.

Además de acceder al interior de la torre, los presentes conocieron la historia de la máquina que activa el reloj y de cada una de las cuatro campanas: Rosarito, Inmaculada, Santa Ana, Virgen del Carmen y María del Rosario. Los voluntarios de Lluïsos fueron los encargados de dar una explicación detallada de todo ello, a la par que amena.

Galardón

Tener la oportunidad de inmortalizar la visión desde tan señalada terraza ya de por sí es un premio, aunque también existe la recompensa a la mejor imagen captada durante la jornada de ayer, una cena para dos personas en el bar Casa Xavi.

Con motivo del 15º aniversario, en el 2018, organizaron un certamen de dibujo y redacción en el que participaron cerca de 1.200 escolares. Asimismo, y con vistas al día 9 de marzo, el grupo está inmerso en la preparación de un completo programa de actos para conmemorar el 450º aniversario de San Luis Gonzaga.