La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, y su homóloga en Castellón, Amparo Marco, acordaron ayer que se citarán con la consellera de Obras Públicas, María José Salvador, para solicitar a la administración autonómica mejoras en la movilidad de ambas ciudades. Ejemplo de ello es la petición para intervenir en el carril bici de la carretera al Grao. En concreto, las munícipes abundarán en la posibilidad de instalar mejor iluminación en el trazado y ampliar la seguridad de esta vía.

Galí agradeció a la primera edila de la capital este encuentro para analizar los retos del 2018. «Es la primera alcaldesa con la que me reúno para compartir preocupaciones y soluciones que afectan a dos municipios limítrofes y es el primer paso para ratificar la voluntad de alcanzar acuerdos también ante otras administraciones supramunicipales», dijo.

Entre los temas que abordaron estuvo la reforma del Camí la Mitgera (conocido como Fadrell en Castellón) que separa los dos términos municipales desde la zona norte de la playa de Almassora. En este sentido, se emplazaron a reactivar las actuaciones acometidas en el 2012, que afectaron a un tramo del trazado y dejaron pendiente una intervención que no se ha producido.

El objetivo es adecuar el vial para los numerosos residentes de la costa almazorense que se desplazan a diario para conectar con el casco urbano o ir a Castellón y también en sentido opuesto, para trabajadores del polígono o usuarios de la playa que residen en la capital. «No hay fronteras y hay que buscar respuestas al bien común», según Amparo Marco.

EL BARRANCO // Por otro lado, trataron la coordinación para mantener limpio el barranco que separa las dos localidades, ante la falta de mantenimiento de su propietaria, la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). «Debe de estar bien para que circule el agua sin obstáculos con lluvias torrenciales», indicó Galí.